A Hermes Gamonal, tenista de la década del 2000, le tocó disputar muchos partidos difíciles, pero ninguno como enfrentar la enfermedad de su hija que sufre diabetes tipo 1.
Fue en 2013 cuando Rafaela Gamonal "debutó" (como se dice entre quienes tienen este mal) en esta condición de salud. "Tenía apenas un año. Llegamos a la clínica con 817 de glicemia, que es altísimo. Estuvo cinco días en la clínica. Los doctores se preguntaban cómo sobrevivió", señaló el ex tenista, quien también padece la enfermedad.
Hoy Rafaela tiene tres pepitas y la diabetes está bien controlada gracias a un aparato de última generación: "bomba de glicemia".
"Es imposible ganar este torneo porque es una enfermedad crónica, pero al menos tengo la suerte de poder competir bien el día a día", contó Gamonal, quien se desembolsó más de cinco palitos por la máquina y mensualmente gasta cerca de 400 lucas en insumos.
Lo cuático es que la diabetes tipo 1 va en aumento en Chile, sobre todo en los niños. Y aunque el tratamiento es parte de las patologías GES, el aparato no está considerado. El "Meme" Gamonal se puso la camiseta y aseveró que "tengo la suerte de costear esa bomba. Ojalá todos tuvieran esa opción".