Las juntas de las comunas de la zona sur y poniente, se han vuelto los encargados de la seguridad.
En unos verdaderos heores sin capa se han transformado los vecinos de las comunas de la zona sur y poniente en medio de las jornadas de manifestaciones a lo largo del Capital.
En que en comunas como La Granja, San Ramón y Lo Prado, al caer el toque de queda las calles quedan desoladas. Lo que queda al descubierto con las comisarías con pocos efectivos policiales y sobrepasados por la emergencia.
Esta situación crítica ha obligado a los vecinos a ponerse los chalecos amarillos y a organizarse para cuidar con sus propias manos e implementos sus hogares. En La Granja, el Alcalde Felipe Delpín ha estado acompañando hasta las 02:00 am, junto a los vecinos de la Villa Los Pensamientos cumpliendo labores de guardia para evitar saqueos y robos de delincuentes que se aprovechan de la situación.
Situación similar a la del Diputado Jorge Durán, quien está en el congreso durante el día mientras que en la noche da una mano en las comunas de Quinta Normal y Lo Prado orientando a los vecinos que montan guardia, para protegerse los unos a los otros. Incluso entrega información a los más desorientados para darles tranquilidad.
Por último, el Alcalde de San Ramón, Miguel Ángel Aguilera, detalló que por las noches en su comuna se arman de manera espontanea mas de 60 barricadas, y a él le a tocado hacer guardia en el consultorio La Bandera, que es el único centro de salud primaria que atiende 24 horas. Hasta ha recibido a vecinos, que llegan por una atención de urgencia para que tengan atención inmediata.
Ante la soledad que golpea a sus comunas durante las noches en toque de queda, las autoridades mencionadas solicitan mayores esfuerzos policiales, para dar seguridad a los vecinos y apoyar el rol de vigilantes nocturnos.