Alas 14 horas en punto, en el lobby del hotel Crown Plaza de Moscú, donde concentra la Selección del "Macanudo" Pizzi, fue la hora que fijó el "Chapulín" de la "Marea Roja" pa' que los chilenos con ganas de sudarla se vistieran de corto y aceptaran el desafío de un grupo de hinchas rusos a jugar una mocha por la amistad.
Organizados por un canal de TV, cinco furgones llegaron por los "jugadores", y en poco más de 40 minutos fueron trasladados hasta una de las canchas aledañas del estadio CSKA, donde la consigna era demostrar por qué somos los bicampeones de América.
"Hasta 1,70 metros nomás", gritó al toque "Arturo Bidón", apenas los locales hicieron su ingreso a la cancha, mientras que el "Cóndor" Benito intentaba poner el orden entre los siete valientes que entrarían al rectángulo verde.
Ya con la pelota rodando, los vodkeros abrieron la cuenta, pero en la segunda mitad apareció el power de los poncherudos jaguares, quienes a puro ñeque supieron dar vuelta la tortilla, donde el "Pepe Rojas" de la Marea (ver foto), brilló con luces propias.
Claro, el doble del ex zaguero de la "U" marcó la diferencia, y eso le sirvió incluso para ser entrevistado por la prensa local, con traductor incluido.
"Vivir la emoción de jugar acá ni en el mejor de los sueños me lo habría imaginado", lanzó el fana de la Selección, quien sobre su parecido con el Pepe dijo que "siempre me dicen lo mismo y me lo tomo con humor. Además jugamos en el mismo puesto", remachó entero agrandado.
MIRA LA PICHANGA
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