Para el 2050, la entidad proyecta que la población aumentará en aproximadamente 2,8 millones.
Durante la mañana de este miércoles, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) dio a conocer las Estimaciones y Proyecciones de Población en Chile 1992-2050 a nivel nacional y los resultados del proceso de conciliación censal.
A partir de la población base se proyecta que hacia el 2050 la población aumentará en aproximadamente 2,8 millones, ascendiendo de 18,8 millones en 2018 a 21,6 millones en 2050.
Como resultado principal, se tiene que para el año 2018 se proyecta un total de 18.751.405 personas, de las que 9.244.484 son hombres y 9.506.921 mujeres, con una relación de masculinidad de 97,2 hombres por cada 100 mujeres.
Las estimaciones y proyecciones de población constituyen las cifras oficiales de población en Chile, y son un importante insumo para las encuestas de hogares del INE, la elaboración de políticas públicas, programas y proyectos de las distintas instituciones del Estado, y también en estudios demográficos especializados de instituciones públicas y privadas.
Fecundidad
Hacia el año 2029 la fecundidad alcancaría su nivel más bajo, con un promedio de 1,57 hijos por mujer al final de su vida fértil, retomando una leve alza al final del período.
En relación con la fecundidad, y de acuerdo con los datos analizados en las Estadísticas Vitales, se espera que presente un movimiento oscilatorio con tendencia a la baja, al igual que los países desarrollados que presentan un nivel de fecundidad similar al chileno.
Aumenta esperanza de vida
La esperanza de vida en Chile tendrá un aumento en ambos sexos, alcanzando al final del período proyectado, es decir en 2050, a 83,2 años para los hombres y 87,8 años para las mujeres, lo que constituye un claro ejemplo del proceso de envejecimiento de la población, que se traduce en un menor número de nacimientos y en una creciente población de adultos mayores, específicamente la población de 65 años y más, que representará el 25% de la población en el año 2050.
Migración reducida
En el caso de la migración, a fines de 2018 el flujo de solicitudes de visa en el Departamento de Extranjería y Migración, por primera vez, comienza una aparente disminución, lo que unido a los cambios en el nuevo marco migratorio que busca regular y ordenar futuros flujos migratorios en el país, permite suponer para el futuro un saldo migratorio positivo, pero bastante más reducido que en los últimos años.