¡Isabel Allende les ganó el gallito a los criticones!

El marido de Isabel Allende casi quedó a potito pelado cuando la escritora le contó que la distinguieron con el Premio Nacional de Literatura.

William Gordon estaba saliendo de la ducha en su casa en California, y según contó la novelista, "se puso a llorar a mares" al saber la buena noticia que la convirtió en la cuarta chilena en obtener el galardón. Su mamá también lloró a través del teléfono y "hasta la perra de la casa se alteró".

Hace caleta de años que el nombre de la periodista que ha vendido más de 50 millones de libros en todo el mundo sonaba para el premio, pero los críticos y sus colegas la hacían pebre, como don Armando Uribe (loree ajoba)

El reconocido escritor Roberto Bolaño opinó que era "mediocre y plagiaria", pero a la aludida no le entran balas, se limitó a decir que atacarla a ella "es subestimar a los lectores".

Tan consciente está de la mala onda que le tiene el medio local, que dijo "si el premio lo dieran mis colegas, no me lo llevo nunca... siempre cuando alguien tiene éxito lo chaquetean, en Chile, como en muchos países, no se perdona el éxito, salvo que uno sea futbolista".

En relación a su obra, explicó que "es muy difícil decir si una cosa tiene calidad, o no la tiene, sólo el tiempo puede probar eso".

En el jurado había sólo un literato, y fue presidido por el ministro de Educación, Joaquín Lavín, quien a través de una video conferencia le comunicó la noticia, que de yapa le lleva un premio de 16 millones de pesos y una renta vitalicia de 20 UTM (700 lucas).

La autora llegó a llorar de emoción. Del galardón dijo que era "el más importante de mi vida, porque me lo da Chile y eso para mí es increíblemente valioso".

Isabel también se refirió a los 33 hombres de la mina San José, una historia de novela que ojalá tenga un final feliz. "Hemos estado pendiente día a día , minuto a minuto, de esa tragedia que al mismo tiempo ha sido un mensaje de esperanza, por eso le voy a dedicar el premio a los mineros, porque en este momento son los héroes chilenos del Bicentenario, más que cualquier héroe de la patria. Ellos han levantado la moral de Chile y han demostrado de lo que son capaces... ha sido una lección extraordinaria para Chile y para el mundo", confesó.

El Presidente Piñera le tiró cualquier flor. "Es una mujer que se lo merece, yo he sido un gran lector de sus maravillosas obras, historias que no sólo nos han entretenido, sino que enseñado aspectos de nuestra propia historia".

A pito de las autoridades que la distinguieron, Isabel aclaró que "nadie puede decir que es un premio político", y sobre el gobierno dijo que "yo creo que hasta ahora lo ha hecho bastante bien".

La narradora llegará al país de las maravillas el jueves 16 y participará de la ceremonia del izamiento de la bandera gigante del Bicentenario.

SOLTÓ LA PLUMA EN LA PAULA Y BAILÓ EN "BIM BAM BUM"

A pesa de que doña Isabel nació en Perú hace varios años, es más chilena que los colaless tricolores. La chiquilla soltó la pluma en la revista Paula, que fue la  primera en tratar temas que de verdad interesaban a las mujeres, como la píldora anticonceptiva. En un famoso reportaje, Allende se probó como bailarina del Bim Bam Bum, y a pesar de su breve estampa, salió bien parada.

En 1975 se viró del Chile de Pinochet con su familia a Venezuela, donde escribió su primera y más famosa novela: "La casa de los espíritus".

Después publicó un montón de éxitos de ventas, que pocas veces fueron bien recibidos por la crítica especializada. Vive en EE.UU. y es muy feliz.

URIBE: "ES UN TRIUNFO DEL CAPITALISMO" 

El Premio Nacional de Literatura 2004, Armando Uribe, no quedó contento con la ganadora, a pesar de que él "no tenía candidato".

Al poeta le ofrecieron ser jurado por la enfermedad del último ganador, pero dijo que "no, porque había criticado negativamente a una de las candidatas".

Sobre Allende opinó que "muestra el bajo nivel literario del jurado que en parte estaba compuesto por personas que me dieron a mí también el premio, y por lo tanto mi crítica también me cubre".

Aseguró que "es un triunfo del capitalismo de mercado en el que todo se vende y lo máximo es el lucro, y la sombra del lucro que es el éxito".

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