La abogada Fabiola Fuentes Contreras es más que un rostro bonito. La profesional de las leyes no ha postulado a reina del Festival de Viña ni tampoco se saca fotos picaronas en traje de Eva como algunas juezas de la tele, pero igual que las magistradas de la pantalla chica deberá impartir justicia pop y arreglar los atados de la barra de la mejor forma posible. ¡Caso cerrado!
La legista tiene 29 años y estudió en la Universidad La República. Siempre tuvo inquietud por solucionar conflictos y arreglar entuertos por eso realizó un diplomado en "Mediación Familiar".
Hace un año que se enteró del proyecto de "Unidades de Justicia Vecinal" (ver nota relacionada), que impulsa el Ministerio de Justicia y que pretende instalar como política pública una manera de resolver los conflictos en los barrios, que no sea violenta ni agresiva.
La "jueza pop" no lo pensó dos veces y postuló al cargo de "conciliador". Ahora está encargada de resolver conflictos en las cuatro unidades de Justicia que conforman el plan piloto en las comunas de Renca, Macul, Cerrillos y Paine.
La idea es que en los barrios más vulnerables la gallada tenga acceso a la justicia y soluciones participativas en problemas cotidianos, como ruidos molestos o atados con mascotas o con la basura.
A diferencia de una jueza, que dicta sentencia, ella debe velar por acuerdos en los que la gente tiene la voluntad de tomarlos. "Este cargo existe en Argentina, Colombia y Perú. La idea es alcanzar acuerdos de forma responsable y como gente adulta, sin recurrir a la violencia. Hago la labor de un tercero imparcial y conciliador que les propone solución".
La Cuarta conversó con la "jueza pop", quien dejó el martillo de lado para explicarnos su labor desde la Unidad de Justicia Vecinal de Renca, en avenida Domingo Santa María 4029.
- ¿Se inspira en las juezas de la tele?
- La verdad es que no las conozco mucho, sólo los he visto haciendo zapping. La diferencia es que yo no tomo una decisión, son las partes las que dicen. "Éste es un acuerdo bueno y lo quiero".
-¿Quiénes forman parte de las Unidades de Justicia Vecinal?
- Va a existir un mediador, un juez árbitro y un conciliador. También hay un facilitador que es un nexo con la comunidad. Él sale a la calle a buscar al requerido para que exponga su problema. A mí llegan casos y debo promover acuerdos entre la gente.
- ¿Y usted le pega al martillito también?
- No, yo propongo, pero no impongo nada a nadie. Mis arreglos se deben ajustar a Derecho, eso sí.
DIRE DE COLEGIO PITEÓ CONTRA POTRERO GUÁCALA
Los dos primeros casos que llegaron ayer a la Unidad de Justicia Vecinal de Renca fueron escuchados por el juez árbitro Claudio Pinto y por la conciliadora Fabiola Fuentes Contreras.
Una de la denuncias más peludas fue la de Francisco Gárate (27), director de la Escuela de Lenguaje Jacarandá, quien asegura que al lado de su centro educacional, donde forman a más de 200 niños, existe un potrero con caballos en el que hasta las moscas hacen arcadas por el olor guácala.
"Ya no damos más. Imagínese que el problema se da cuando los niños almuerzan. He hablado con ellos pero no ha habido respuesta", señaló el joven.
La Unidad de Justicia Vecinal deberá consultar a la contraparte y dirimir en 40 días.
