Tras varias reuniones en que todo parecía bien encaminado, ayer todo se derrumbó entre Corea del Norte y EE.UU., luego de una fallida cumbre entre ambas delegaciones en Suecia, aunque los gringos lo desmienten.
La noticia de la semana fue que Kim Jong-un y Donald Trump retomarían la vía diplomática luego de algunos desajustes en su relación. Esto sucedería ayer, en Suecia, y lo que se adelantaba como un pasito más hacia adelante en una relación tóxica, acabó de la peor manera: Corea del Norte y Estados Unidos cortaron sus relaciones.
Así lo informó el país asiático, luego de una cumbre en Suecia en la que ninguno de los mandatarios participó, pero que llevaron adelante sus respectivos equipos, instancia en la que se llegó al punto en el que el diálogo diplomático se terminó.
Fue el emisario norcoreano, Kim Myong Gil, quien informó al mundo del revés, después del encuentro que sostuvo con su par gringo, Stephen Biegun. "Las negociaciones no han satisfecho nuestras expectativas y finalmente fracasaron", expresó.
Además, de inmediato apuntó a su interlocutor como el gran culpable de lo acontecido. "El fracaso de estas negociaciones, que no desembocaron en progreso alguno, se debe únicamente a Estados Unidos que no ha renunciado a su acostumbrada actitud", declaró Kim Myong Gil.
El gran objetivo de estos diálogos era propiciar el desarme nuclear de Corea del Norte, algo que se ve cada vez más lejano, sobre todo ahora que el líder del país asiático está más que furioso después de este fracaso diplomático.
What? Pese a la cerrada posición norcoreana, al parecer los gringos entendieron todo en "chino", pues ellos definieron la cumbre como una instancia de "buenas conversaciones".
"Los comentarios hechos más temprano por la delegación de Corea del Norte no reflejan el contenido ni el espíritu de la discusión de hoy, que duró ocho horas y media. Estados Unidos llevó ideas innovadoras y tuvo buenas discusiones con sus homólogos norcoreanos", dijo la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus.