La iniciativa, digna de ser copiada en nuestro país, es de la Universidad de Ciencias Médicas de la localidad de Las Tunas, en Cuba. Allí los estudiantes participan en jornadas para promover la salud entre los estudiantes y a la vez sumarlos como protagonistas en la lucha contra las adicciones.
Y cuando estamos cerca de marzo, mes de inicio de clases en la educación superior, les resumo cómo enfrentan las universidades caribeñas el tema de las drogas.
Uno de los puntos importantes de las charlas va en que los jóvenes se percaten cómo es el proceso de desintoxicación de un adicto. Este proceso no solo tiene que ver con "limpiar" el cuerpo de sustancias químicas, sino que también va por el lado cognitivo.
Las charlas hacen énfasis en los primeros pasos de una persona que cae en las adicciones. En esta etapa figura el tabaco y el alcohol como los eslabones primarios o base. "Lo que comienza como un juego termina esclavizándolos", señalan los especialistas cubanos.
Es interesante analizar el punto de vista de los conferencistas que trabajan con los estudiantes. Ellos identifican procesos: la ruta sociocultural (amistades e interés de validarse del joven ante sus pares); estado de riesgo, perjudicial y finalmente a la dependencia de la sustancia, señalan.
En rehabilitación es una verdad absoluta que la prevención es la mejor arma en la lucha contra las adicciones. Es por eso que resulta destacable el trabajo que hace la casa estudiantil cubana.
A través de un trabajo de aula se identifica el problema y capacita a los estudiantes en torno al tema. La idea es convertir a cada uno de los participantes en portadores del mensaje y así expandirlo entre sus familiares y amigos.
Es por eso que ante el pronto inicio de un año académico, me atrevo a llamar la atención del mundo universitario. El consumo de drogas y los problemas asociados, son también un problema social y cuando tenemos que poner sobre la mesa la situación actual, vale la pena exigir a sus autoridades información y capacitación como parte de las actividades.