Un lamentable hecho se registró durante la jornada de ayer en El Salvador, durante un partido del torneo local de fútbol entre Alianza y FAS. Según se supone, las entradas habrían sido sobrevendidas, lo que generó que un alto número de personas se quedaran con sus entradas en la mano, pero sin poder ingresar al estadio.

Esto originó que se formara una turba que logró abrir una entrada, pero que arrasó con lo que estuviera a su paso, incluyendo personas que no se percataron de lo que sucedía. 12 aficionados murieron al interior del estadio Cuscatlán de San Salvador.

Un día después del suceso que dejó a cientos de lesionados, medio locales conversaron con sobrevivientes. Sandra Guzmán, de 40 años tuvo que ser internada en el capitalino hospital nacional Rosales, y tras ser dada de alta narró su experiencia.

Despertó en el hospital

Según narró la mujer afectada, la gente comenzó a entrar al estadio de un segundo a otro. “Me cayeron un gran montón de gente encima, no podía ni respirar, me estaban ahogando”, partió diciendo.

“La gente me empujaba para meterse (al estadio), ya no me dieron chance de retroceder, cuando vine a ver entré en crisis, tenía mucha gente encima. Me desmayé, cuando vine a despertar estaba en el hospital”, agregó.

El partido tuvo que ser suspendido mientras los cuerpos de socorro evacuaban a las personas, una operación que involucró a centenares de agentes de Policía y efectivos militares.

Por su parte, el Presidente del país, Nayib Bukele usó sus redes sociales para referirse a este incidente y anunciar que se investigará a todos los responsables para determinar su culpabilidad. “Todos serán investigados: equipos, directivos, estadio, boletería, liga, federación, etc. Sean quiénes sean los culpables, no quedarán en la impunidad”, escribió en su cuenta de Twitter.

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