La celeste de Oscar Washington Tabarez salió con así la tremenda ilusión de llegar a la final de Sudáfrica 2010, la que se mantuvo hasta el minuto 71, luego que Holanda convirtiera la primera pepa en el primer tiempo y luego lo empataran los celestes.
Se fueron al descanso igualados, pero los tulipanes no querían dejar escapar la oportunidad de ser los primeros finalistas de esta Copa del Mundo para intentar teñirla de naranja.
Fue en el minuto 71 cuando los europeos rompieron la igualdad y a los tres minutos terminó por derribar el sueño uruguayo de pasarle por encima a la naranja mecánica de Bert Van Marwijk, porque los tulipanes de nuevo marcaron: 3-1.
Pero los uruguayos no querían irse sin agotar todas las posibilidades y a dos minutos del final encajaron la pepa que le puso emoción al partido que se jugó a todo ritmito.
Al minuto el árbitro pitó y terminó un partido que terminó con los tulipanes defendiendo su arco, pero con una final ad portas, después de 32 años de estar ausente en esta instancia.
Al final, a Uruguay no lealcanzó, y ni la figura de Juan Pablo II, al que pintaron en Montevideo con la camiseta celeste pudo darle una manito al conjunto charrúa.
De esta manera, el país terminó con una lágrima en los ojos y con la ilusión de seguir avanzando en la primera semifinal de Sudádrica 2010, nada menos que frente a los tulipanes.