Se trata de la primera baja del gabinete del “León”, a poco más de un mes de haber asumido como mandatario.
Informan los medios trasandinos que hace algunas horas el presidente Javier Milei pidió su renuncia al ministro de Infraestructura Guillermo Ferraro.
Se trata de una drástica decisión empujada, según Ámbito y Clarín, por la supuesta filtración de reuniones de gabinete. En rigor, a Ferraro se le inculpa haber divulgado los dichos que el mandatario profirió contra los gobernadores provinciales. A ellos, advirtió, “los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos”.
Esto último, en el marco de la lucha del oficialismo por concretar la Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, también conocida como “ley ómnibus”.
Antes, tal vez con otro tenor, lo había anticipado el ministro de Economía Luis Caputo. “El déficit cero no se negocia”, escribió en su cuenta de X, y añadió que, de no aprobarse todas las medidas económicas propuestas en el proyecto de ley, “el ajuste será mayor, fundamentalmente para las provincias”.
Es más, aunque aclaró que no era una amenaza, Caputo sostuvo que el gobierno ya evalúa “las partidas provinciales que se recortarán inmediatamente si alguno de los artículos económicos es rechazado”.
Primera crisis
La salida de Guillermo Ferraro sería anunciada en breve. Y aunque haber filtrado información sensible parece la causa principal, Clarín puntualiza que hay también otro motivo detrás: su pésima relación con el jefe de gabinete Nicolás Posse, hombre de máxima confianza para Milei. Tal vez el más cercano después de su hermana Karina.
Ferraro, así las cosas, se convertiría en la primera baja del gabinete del “León” desde que asumiera el mando de la Argentina el pasado 10 de diciembre.