Muchos pelaban a Nelson Acosta y al Bichi Borghi por la fama de buenos pa' los asados que tenían como entrenadores de Chile. Pero nadie contaba con la astucia de Jorge Sampaoli, que como buen argentino no le hace asco a los cortes parrilleros.
Es que ayer se abrieron las puertas del lugar de concentración de la Roja: Toca da Raposa II, lo que en español significa la guarida del zorro. Y como los jugadores chilenos esperan que la señora del anfitrión esté con ellos, porque siempre se necesita suerte en un Mundial, también le pondrán bueno afilando el colmillo.
El manso quincho los recibirá, para poder distraerse un rato de la tediosa concentración a la que estarán sometidos. Muchos ya pidieron que no les cuezan mucho su pedazo, porque prefieren la carne más cruda...
Claro que Don Sampa no piensa solamente en atragantarse con el choripán. Por eso hizo pedidos especiales para el lugar de entrenamiento, como tener el pasto más corto que su pelo. Hará fútbol en la cancha más pulenta, que es la que cumple con las medidas que quiere el pelón.
Lo que más le preocupa al entrenador es que no le vayan a sapear sus prácticas. Los muros no son muy altos, por lo que pidió que sobre ellos pusieran publicidad para tapar la visual. Además, por si algún vovi quiere pasarse habrá un cerco eléctrico. Para la seguridad habrá 10 carabineros que viajan desde Chile, 15 guardias que pone la FIFA y tres más que la ANFP llevará.
Eso sí, no todo será pega las 24 horas. Una cancha de tenis estará esperando a Sampaoli, un vicioso de este deporte que buscará pegar el revés de Guga Kuerten.
