Con 17 años María Paz Aguilera (34) postuló a la Escuela de Investigaciones de Chile. Fue seleccionada y estuvo durante tres años con régimen interno. En su curso, de 33 alumnos, eran sólo 7 mujeres.

"Éramos casi todas de regiones, entonces nos apoyábamos harto", reveló la sanantonina, quien a los 5 años se fue a vivir a Iquique.

En un mundo lleno de hombres, ella supo destacar. Antes de tener un año recorriendo las calles de Santiago, María Paz fue destinada a la Brigada de Investigación Criminal José María Caro, en Lo Espejo. "Ahí fui la única mujer durante dos años. Recuerdo que mi tutor me cuidaba en todo. Fue el pilar que tuve para después seguir", confesó María Paz, quien luego estuvo en la Brigada de Antinarcóticos de la PDI en Antofagasta.

Hoy, es subcomisario de la Brigada de Investigación Criminal de Alto Hospicio de la Policía de Investigaciones, en la Región de Tarapacá, siendo la primera mujer que se convierte en jefa de la agrupación "Microtráfico Cero" del área.

Su destacada labor la llevó a ser considerada como una de las "Mujeres que dejan Huella 2019", que organiza Alto Las Condes y Comunidad Mujer. "Es un orgullo, no pensé que podría llegar a ser tan importante. Hace poco fuimos a Antofagasta con mi grupo de trabajo y todos me decían "voté por ti", es impactante todo lo que ha provocado el tema", indicó.

La subcomisario de la Brigada de Investigación Criminal de Alto Hospicio, que el 2018 lideró la "Operación Extinción", el mayor operativo logístico organizado en su unidad y que movilizó más de 300 detectives desde Arica hasta Santiago, sabe que esta postulación, donde se destaca a las mujeres pioneras y agentes de cambio en Chile, puede motivar a más adolescentes que, como ella, se sumaron a la Policía de Investigaciones.

"La idea, creo yo, es dejar esa huella, ser referente para las más jóvenes, decir que las mujeres podemos llegar a ser jefas, a hacer las mismas labores que los hombres y hacerlo igual de bien que ellos", concluyó.