Cada vez que Colo Colo entrenaba durante la mañana, los gritos de Pablo Guede se escuchaban hasta el metro Pedrero.
Conocido es el estilo del ex técnico de San Lorenzo: mucho grito, orden, instrucciones y gesticulaciones. Lo hace siempre en los entrenamientos y también los días de partido. Pero ayer fue completamente diferente.
El deté albo llegó a la práctica y partió derechito al fondo de la cancha de entrenamiento sin pescar a nadie. Allí, casi escondido detrás de los carteles publicitarios, estuvo casi 25 minutos mirando el panorama.
Al ratito se puso a caminar, y entero encapuchado, observó los trabajos que realizaban sus perniles junto al staff técnico del Eterno.
Con los jugadores sin cachar nada, el técnico por fin decidió hablar, pero sólo con sus ayudantes Gustavo Grondona, Agustín Salvatierra, Jorge Schwager y el PF Octavio Manera, sin pescar a ningún jugador.
Ya cuando viró, un ágil reportero le preguntó qué miéchica le había pasado, a lo que respondió "estoy cagao de frío... estoy echo mierda". ¿Guats?
Cabe recordar que el Cacique deberá sudarla este viernes ante Huachipato en el CAP de Talcahuano.
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