Como quien se levanta a comprar pan en el negocio de la esquina para tomar desayuno, un brillante cabro en el centro de Santiago quiso partir el día a lo campeón sin moverse mucho de su casa.
Convencido de que ahora chorearse un camión de valores es tirar y abrazarse, Esteban Gubernatti (21) habría tomado una pistola a fogueo, salió del Condominio Bello Centro Esperanza e intentó emboscar un vehículo Brinks que pasaba frente a su domicilio.
"Cerca de las 9.50 horas este camión transitaba por San Pablo en dirección al oriente. Al llegar a la calle Esperanza dobla y es interceptado por dos individuos que se atraviesan y, además, uno de ellos lo apunta con un arma intimidándolo para que parara", explicó el general Víctor Herrera, jefe de la Zona Metropolitana Este de Carabineros.
"Afortunadamente el conductor de Brinks no para y justo además iba pasando una patrulla nuestra", valoró el oficial.
Gracias al rápido operativo verde, Gubernatti (conocido como el “Chispa”) y su compadre Patricio Aguilar (33), apodado el “Loco Pato”, fueron sacados de una oreja desde el departamento del primero.
La parejita juraba que iba a pasar piola en la comodidad de su hogar, pero los propios vecinos los sapearon, aburridos de que el “Chispa” diera jugo a los residentes del condominio.
Tras su captura, Gubernatti y Aguilar serán formalizados hoy por el doméstico numerito que se pegaron en la mañana de ayer.
