Un largo retorno a casa

La Fuerza Aérea se puso con un avión para que cien lolos de Rapa Nui, que estudian en el continente, volvieran gratis a sus casas a pasar las fiestas de fin de año y las vacaciones de verano.

Mako Riroroko no veía a su familia desde principios del año académico, cuando el a el joven a sus 19 años dejó Isla de Pascua para cursar el primer semestre de gastronomía en Viña, en la Universidad Santo Tomás.

Por eso, contaba los días para el vuelo anual que hace la Fuerza Aérea con un avión lleno de estudiantes que regresan a casa a pasar las fiesta de fin de año y las vacaciones.

"Lo más difícil fue establecerme y acostumbrarme a la vida de acá", dijo antes de volver. "Todo es diferente, la civilización es diferente, hay muchas personas, uno se aburre de ver tanta gente. Es demasiado diferente su personalidad, nosotros somos más respetuosos", agregó.

Un Boeing 767, que usa el Presidente Piñera, fue el encargado de llevar a cien muchachos como Mako a la isla, quienes fueron recibidos luego de las cinco horas de viaje por emocionados familiares como Carlos Riroroko, quien esperaba a su hija Hangarahi.

Tan feliz estaba el padre de recibir a su niña -que egresó de preparadora física, en Rancagua-, que se rajó con un asado de pescado, pollo y chancho para toda la prensa que acompañó el reencuentro, además sirvió espumante dentro de un coco.

Carlos, además, celebró el cumpleaños atrasado de Hangarahi con un traje típico -que tiene menos tela que un pañuelo.

En lengua originaria, el padre felicitó a la joven por su logro académico y le cantó el cumpleaños feliz en español para luego hacerlo en su dialecto.

"Del continente lo que más me llamó la atención es la gente, es muy acelerada y todo lo tienen planificado, a diferencia de la isla que nada lo es, y también me impresionó la cantidad de cosas que hay en los mall. Fue difícil acostumbrarme a hacer todo sola, pero igual ser de la isla fue un plus porque son muy amables y hasta me hacen descuentos", dijo.

Hangarahi no sabe si su futuro a mediano plazo está en su isla o en el continente, pero le gustaría que fuera con su pololo que es rancagüino y en los próximos días viajará a conocer a su suegro que lo mirará con lupa de pies a cabeza.

En tanto, Ingeniería en Mantenimiento Industrial en la U. Santo Tomás, de Viña, estudia Alexis Sandoval, de 19 años, que pasó todos los ramos de primero con un 6,3 de promedio.

"En la isla no hay sistema educativo para la gente que sale del colegio, debemos emigrar y no me aproblema porque me gusta estar solo, siento que maduro más", dijo.

"En la isla dejé varias chiquillas y en el conti, también", se quebró Alexis, y agregó que "en el futuro mi intensión es sacar mi título, después un doctorado en mecánica, tener mi casa en un ambiente tranquilo en la isla y ayudar con mi conocimiento", dijo.

Vínculo. El comandante de Escuadrilla, Guido de Pol, fue el encargado del operativo y manifestó que "este vuelo se enmarca dentro del apoyo a la comunidad de la FACH con el traslado de personas a los lugares más apartados. La FACH tiene presencia en Isla de Pascua hace mucho tiempo, desde la década del 50' cuando el capitán Roberto Parragué en un avión anfibio amarizó en después de 19 horas, ahí comenzó un vínculo muy estrecho ya que los apoyamos con traslado de pasajeros y un gran operativo médico cada año".

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