Con una clase magistral de combos, patadas en el hoci y maguachis asesinos, la municipalidad de Las Condes lanzó una nueva estrategia para combatir la delincuencia que afecta a la comuna.
Se trata de 190 guardias e inspectores municipales con conocimientos en defensa personal y artes marciales, quienes deberán frenar a los patos malos que hacen de las suyas en el sector oriente de Santiago.
Desde el 1 de marzo, los encargados de la seguridad tendrán a disposición bastones retráctiles y gas pimienta, método aprobado por el alcalde Joaquín Lavín.
"No queremos que nuestros inspectores municipales sigan enfrentándose a mano limpia. Queremos ocupar elementos que pueda comprar cualquier persona. El gas pimienta es uno de ellos", aseguró la máxima autoridad de Las Condes.
A PATADA LIMPIA
Manuel Mena (41) es patrullero comunal en Las Condes y señaló a La Cuarta que "para mi seguridad personal, el gas pimienta estaría bueno. No es que yo lo ocuparé porque me miró feo. Pero si me atacan yo lo ocuparía como defensa".
Por su litro, Raúl Conejero (64), también guardia, aclaró que "si bien va a la baja la delincuencia se mantiene en su potencia. Acá es fuerte porque los delincuentes ocupan cuchillos y revólver".
Las Condes quiere que queden como Jackie Chan
Tras el anuncio, el alcalde Lavín señaló que las clases prácticas estarán a cargo de dos maestros en técnicas asiáticas. La idea es que los titanes queden más preparados que Jackie Chan a la hora de enfrentarse a un acto de delincuencia.
"Va a existir un incentivo económico grupal que va a tener que ver con la reducción de la delincuencia en Las Condes", declaró tajante el ex candidato presidencial.