Sobre qué pasó en los segundos previos al desplome del vuelo, que se transformó en una de las mayores tragedias aéreas, poco se sabe.
Hasta ahora, se manejan varias teorías sobre el accidente que acabó con la vida de 71 almas
Lo que sí se sabe con certeza es que la delegación garota debió cambiar sus planes de vuelo desde su país a Colombia, debido a que la Agencia de Aviación Civil de Brasil les impidió desplazarse a Medellín en un vuelo chárter.
Por esta razón, abordaron un avión comercial en el Aeropuerto Internacional Viru Viru, Bolivia, en un vuelo de la aerolínea LaMia, rumbo a Colombia.
En tanto, el director de Aerocivil, Alfredo Bocanegra, informó que fueron localizadas las dos cajas negras por personal de seguridad aérea de la aerocivil, que serán claves para saber por qué se estrelló el avión.
Las teorías:
Cálculo
Antes de desaparecer del radar, los tripulantes del avión informaron de fallas eléctricas.
Lo que pasó a continuación, nadie lo sabe. Una de las teorías que se maneja es que el capitán decidió evacuar el combustible para que no se incendiara el avión al desplomarse.
Una de las sobrevivientes de la tragedia, la azafata Ximena Suárez, declaró que el piloto, experimentado y socio de la compañía, realizó esta maniobra que le salvó la vida y que, de confirmarse que sea cierto, transformaría al capitán en un verdadero héroe.
Combustible
Algunas fuentes, aunque nada oficial, apuntan a la posibilidad de que el capitán del avión calculó mal y se quedó sin combustible, lo que provocó una falla eléctrica en el avión.
El capitán Rafael Martínez-Guerra afirmó en Caracol Radio que "si se le acabó la gasolina con los motores apagados es difícil llegar".
Prioridad
Al saber que tenían problemas con el avión, la tripulación habría pedido "prioridad" para aterrizar y la torre de control se la concedió. Pero a esa misma hora, según Caracol Radio, otra aeronave de la compañía colombiana Viva Colombia, especializada en vuelos de bajo coste, solicitó el nivel de "emergencia por problemas técnicos".
Debido a este pedido, se le pidió al avión donde viajaba el Chapecoense que diera otro giro para hacer tiempo hasta poder tocar tierra. Lamentablemente, once minutos después de pedir prioridad, la torre de control del aeropuerto perdió la comunicación con la aeronave.
El historial negro de la línea aérea
Lamia (Línea Aérea Mérida Internacional de Aviación) es una pequeña aerolínea que cuenta con dos aviones British-Aerospace BAE- Avro, de cuatro reactores, con capacidad para hasta 90 pasajeros.
Se fundó en Venezuela, pero el 2014 se reubicó en Bolivia, donde actuaba como pequeño operador.
Según informó el diario "El País", desde que este modelo comenzó a operar en 1981, ha protagonizado 13 accidentes con más de 200 muertos.