Consecuencias sociales inesperadas son las que denunció hoy el ministro de educación Joaquín Lavín producto del movimiento estudiantil. El secre de estado se reunió con padres y apoderados de Santiago, quienes pitearon porque no tienen con quien dejar a sus hijos de educación básica.
La mayoría de las dueñas de casa que llegaron a un diálogo con el ministro y el alcalde de Santiago Pablo Zalaquett, manifestaron las complicaciones que tienen en sus hogares al no poder enviar a sus hijos a la escuela, ya que ellas trabajan y no tienen recursos para pagar nanas.
Los apoderados también destacaron que los lolos de cuarto medio de liceos municipalizados no han podido prepararse para la PSU en los cursos especiales gratuitos que cada fin de semana ofrecen los establecimientos.
"Lo que más me gustaría por la buena hacer un llamado al diálogo a los estudiantes secundarios, paremos esto. Estamos dispuestos a conversar, a estudiar todos los temas, pero la verdad es que estas tomas están perjudicando a mamás, a papás y a muchos niños que quieren estudiar", afirmó Lavín tras el encuentro.
Ante las tomas de escuelas y liceos, el alcalde Zalaquett no descartó efectuar desalojos.