Polémica causó el proyecto de "Ley Uber" que ingresó ayer a la Comisión de Transportes del Congreso, y que busca regular los servicios de transporte y obliga a los conductores a poseer licencia profesional A1 y a no tener antecedes penales por delitos sexuales, tráfico de drogas o manejo en estado de ebriedad con resultado de lesiones o muerte.
Además el documento anunciado ayer por la ministra de Transportes, Gloria Hutt, sacó ronchas (ver nota a aparte) porque impone sanciones para las empresas, los conductores y pasajeros que incumplan las exigencias. La aplicaciones como Uber, Cabify e Easy Taxi deberán constituirse como empresas de transporte remunerado de pasajeros, iniciar actividades y pagar impuestos en Chile.
Para el experto en Transportes y académico de la Universidad de Santiago, Rodrigo Martin, la regulación de las plataformas tecnológicas del transporte tiene dos lados. "Por uno, funciona como una buena fuente laboral y es útil. Pero no desmotiva el uso de las vías. No ayuda a descongestionar porque la gente toma Uber en vez de caminar".
Para Martin, en términos de exigir licencias tipo A1 y seguros a las empresas, "genera ciertos filtros, y me parecen medidas razonables, aunque en términos de fiscalización no creo que sea demasiado duro".
Otros de los aspectos que aborda el proyecto se refiere a que los conductores también estarán obligados a contratar seguros de responsabilidad civil para los pasajeros.
Taxistas dicen que "es un traje a la medida para empresas" y Uber sostiene que 75 mil quedarán cesantes
Respecto a los taxis el proyecto establece que fomentará el uso de tecnologías para captar pasajeros y establecer mecanismos de cobro distintos al actual taxímetro. Además señala que los viajes compartidos, se podrán realizar solo en taxis colectivos.
Para Claudio Morales, de los Taxistas Independientes, la "Ley Uber" es un "traje a la medida para las empresas tecnológicas". Agregó a Cooperativa que "abiertamente es un traje a la medida para estas empresas tecnológicas. Piden lo mínimo, pero no habla tampoco de la cilindrada de los vehículos o si van a ser citycar (...)Vamos a andar más de 140 mil vehículos en la calle prestando un mismo servicio".
En una declaración pública Uber señaló que ven "con preocupación que los lineamientos incorporados podrían generar efectoe negativos entre conductores y usuarios". Específicamente la exigencia de licencia profesional "limitará seriamente las oprtunidades económicas de 75 mil socios conductores".
Además la entrega de información que se requerirá a las empresas, "podría generar una vulneración de la vida privada de conductores y pasajeros".
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