Con solo 17 años, la única ocasión en que Igor Lichnovsky había sido un "androide" titular de Sampaoli, fue en un amistoso contra Alianza Lima, el 8 de octubre, con triunfo azul por 2 a 0.
Como fue una mocha entre amigos, su actuación pasó piola. Pero la rotación del elenco azul le dio la oportunidad de descartucharse oficialmente en el clásico universitario y el cabro chico respondió siendo el mejor azul dentro de la cancha.
"Di un paso importante en mi carrera al debutar en un partido importante, pero siempre lo he dicho... quiero ir paso a paso. Aunque la idea era hacerlo con un gol jajá", declaró el espigado central, que reconoció vivir "un sueño al jugar un clásico" y le agradeció a Jorge Sampaoli por "darme la confianza".
Lichnovsky no quiso agrandarse por haber sido elegido el jugador del partido por el Canal del Fútbol y afirmó que "hay que tener suerte a veces y yo me siento con suerte de estar en este equipo". Aunque sí sacó pecho al reconocer que no se siente ni diestro ni siniestro, "porque me manejo con los dos perfiles".
El debutante, que llegó a la "U" cuando tenía 10 años, se acordó de su viejo que está en el cielo y le dedicó su actuación. "Él fue el primero en llevarme a la "Quinta Azul", una academia de ex futbolistas de la "U", recordó el "crá".
Por otro litro, uno que le tiró flores a Igor, fue Eduardo Bonvallet. El "Gurú" escribió en su cuenta de twitter que "por fin aparece un jugador alto y bueno. Le va a dar muchas satisfacciones al fútbol chileno".