¿Por qué lo hizo? Papá de Johanna se quebró tras hablar sobre trágico final de Nibaldo

Juan Hernández habló sobre su hija luego que este lunes se presentara ante la Fiscalía. "Tiene que haber justicia", indicó.

Durante este lunes, Johanna Hernández se presentó ante la Fiscalía para continuar con la investigación de la muerte su esposo Nibaldo, el profesor que fue asesinado en Valparaíso.

Y en ese sentido, el Ministerio Público le pidió a la mujer que se realizara exámenes pquiátricos para establecer su responsabilidad en el fallecimiento de su marido.

Sin embargo, uno que sacó la voz en ese escenario fue su padre, quien se refirió a las distintas actitudes que tuvo su hija, las cuales la habrían llevado a cometer el crimen junto a Francisco Silva, su pareja en ese entonces.

"Estoy sufriendo mucho. Un dolor grande por todos lados. Tiene que haber justicia. Ya estoy cansado. Que termine luego todo esto. No los quiero ver. Es un dolor más grande. No la he visitado en la cárcel. No estoy capacitado para ir a verla. Será muy difícil", comentó Juan Hernández en diálogo con el "Muy Buenos Días".

Además, habló sobre lo que sintió tras enterarse que Johanna estaba involucrada en el asesinato de Nibaldo. Incluso, reveló algunas situaciones que le llevaron a alejarse cada vez más de ella en los últimos años.

"Estoy muy decepcionado de mi hija. Yo era todo para ella. Yo estaba pendiente de todo (...) Era manipuladora, celosa conmigo. No me dejaba tener pareja. Estuve 25 años viviendo solo. Me las corría. Que estuviera para ella nomás. Se enfrentaba con ellas. Decía 'no me gusta esa mujer'", aseguró en el matinal de TVN.

Desconsolado

Por último, sostuvo que todo lo que hizo fue "por ambición. Por quedarse con la casa, el auto, las casas. Les falló a todos. Yo nunca pensé que iba hacer lo que hizo".

Incluso, se quebró al hablar Nibaldo. "Los dos manipuladores -Johanna y Francisco-. Lo que hicieron, lo hicieron los dos. Lo único que me pregunto es porqué lo hizo. Lo quería mucho, era buen padre. Muy buena persona. Es lo máximo. Un 7. No merecía morir", finalizó.

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