La joven apunta a tres venezolanos. Uno de ellos respondió a un llamado telefónico en medio de la desesperada búsqueda familiar.
Un dramático testimonio compartió Camila Esquivel, hija mayor de Christian Esquivel, taxista que fue secuestrado en la comuna de La Tiraba, en la Región de Tarapacá.
“La situación es chocante porque no hay resultados, no han encontrado nada. Mi papá sigue en estado de shock, está adolorido entero, no recuerda bien lo que le hicieron porque lo drogaron. Es peligroso porque su fuente de trabajo es el taxi”, explicó la joven.
En diálogo con Tu Día, Camila relató que “el jueves 10 de febrero era el cumpleaños de mi hermana menor, cumplía 6 años. Él, a las 20:45 horas había finalizado su jornada laboral y estaba en el domicilio de mi tía. Ahí se encontraban tres hermanos de él. Se tomó un tecito y les comentó que iba a comprar pan para irse a La Tirana para tomar té con mi hermana”.
“Él se va con pasajeros al terminal de buses y la cosa es que no llegó. A las 22:00 horas su esposa llama a su celular, le contesta un venezolano y le dice ‘tu esposo no está acá’ y cuelgan”, añadió.
Además, explicó que “yo soy de Arica y a las 01:30 de la mañana mi papá no aparecía y me llamaron, como hija mayor. Todos se dividieron a buscarlo en todos los pueblos de Iquique”.
“Mi papá dice que tiene una imagen, que sube un copiloto, que estaba tomando su té en el termo y pierde el conocimiento. Solamente tiene imágenes que tenía a personas pegándole y amenazando al copiloto y él acelera rápido y lo llevan a un pueblo al interior de Huara. Ahí lo dejaron botado”, continuó.
Investigación policial
Finalmente, la joven reveló que a su padre “le registraron todo, querían llevarse el vehículo y en ese minuto mi papá logró esconder las llaves abajo del motor. Logró esconderlas y lo empezaron a golpear brutalmente hasta dejarlo inconsciente. Él recuerda que llegó una persona en vehículo a buscar a estos tres venezolanos”.
“Mi papá despertó a las 6 de la mañana, llegó manejando hasta La Tirana, sus hermanos volaron a buscarlo y mi papá no estaba en condiciones de hacer nada. Denunciaron la situación y lo bajaron a Pozo Almonte y ahí le hicieron todos los exámenes. Está todo en proceso. Carabineros y PDI están en contacto con él”, cerró.
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