Regularmente en el matinal de Chilito, el "Buenos Días a Todos", los panelistas aprovechan lo distendido del ambiente para subir al columpio al conductor, Felipe Camiroaga, y tratarlo de donjuán y versero con las minocas. O sea, un cuentero de tomo y lomo.
El atado es que el animador -por estos días de vacaciones en España- se tomó muy a pecho el mote de sapo lenguado y hoy es la flamante voz de los cuentos infantiles con que la multitienda de la cual es rostreli pretende romperla para el Día del Niño.
Desde abril que los cerebros de la tienda vienen trabajando este proyecto onda retro, donde en vez de ofrecer juguetes gringos de esos que atontan a los nenes, optaron por crear un producto 100% chilensis y terriblemente educativo.
Se trata de los "Magicuentos", que no son más que cuatro historias clásicas como "Caperucita y el lobo feroz", "Hansel y Gretel", "Los tres chanchitos" y "El patito feo", pero en versión interactiva.
¿Cómo es eso? Papita pa'l loro. Aparte del libraco con el cuento (que fue ilustrado por artistas nacionales), el combo le trae un cidí con el relato tierno e hipnotizador de Felipe Camiroaga, el lobo feroz de las chicas de la tele y cuentero por excelencia. ¡Las chiquillas hicieron fila para agarrarlo pa' la palanca!
Eso, más cuatro títeres para dedos y un escenario para recrear las historias narradas por el Pipe y musicalizadas por Luciano Rojas, pulento músico criollo y ex bajista de La Ley.
Más encima, si se aburre de que Camiroaga le venda la pomada, el disco le trae la opción karaoke para que sea el papi o la mami quien lo relate al querubín.
Más encima, este producto nacional se cuadra con los niños más desvalidos y por cada ejemplar que se vende, un porcentaje de las lucrecias va a las arcas de la Unicef, según contó el gerente de Juguetería de Ripley, Felipe de Tezanos.
- ¿Y por qué poner al Pipe a contar cuentos?
- Le pedimos a Felipe que hiciera de narrador, porque es un personaje muy querido por las mamás y las dueñas de casa. Es un rostro muy transversal.