Los comerciantes mantuvieron sus puestos cerrados durante cerca de un año, por lo que se les complicó mantener los pagos al día.
Un grupo de comerciantes del Galpón Cordillera del Persa Bío Bío se encuentran en un problema gigante para poder seguir operando en sus locales. Según informó el locatario y presidente de la Asociación Gastronómica del Galpón Cordillera, Patricio Benítez, todo es por deudas que se arrastran de la pandemia.
En conversación con Radio Bío Bío, Patricio comenta que los locales de comida del recinto se mantuvieron cerrados por cerca de un año, debido a las cuarentenas. Esto originó una deuda de arriendo de parte de los locatarios, quienes al no tener ingresos, se les complicó realizar los pagos.
Ante este panorama, los locatarios fueron demandados por la inmobiliaria y notificados para un desalojo. Benítez alega que fuera de los meses de pandemia, todos los pagos están al día, incluyendo agua y luz del lugar.
La inmobiliaria no da su brazo a torcer
Tal como señala el presidente de la asociación, la “inmobiliaria Miraflores, que es el dueño, está súper sesgado en sacarnos”.
“No sabemos cuando nos van a ir a sacar. Somos 200 locatarios, si bien es cierto, es un tema entre privados, se transformó en un tema social porque, directa o indirectamente, somos alrededor de 700 personas que dependen del trabajo que nosotros damos”, agregó.
Patricio Benítez agrega que junto a los comerciantes querían “pagar esos 7 meses, pero en definitiva nos demandó por no pago. No nos perdonó ningún mes de la pandemia”.
“Si a nosotros nos dicen que lleguemos a un acuerdo y que nos vayamos en seis meses más, está bien, nos vamos en seis meses más. Somos personas honestas, que pagamos impuestos y no trabajamos de manera ilegal”, concluyó.
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