Con las cabezas de pescado que Osvaldo Rojas ha realizado por una buena causa se podría escribir un libro titulado: "Las Cabezas de Pescado que ha Hecho Osvaldo Rojas por una Buena Causa".
El último año el locutor de la radio Tropical Latina de San Fernando accedió a la petición de una auditora y posó desnudo junto a una piscina. Como si eso fuera poco, el verano de 2010, agobiado por el calor, trasmitió su programa en calzoncillos, y luego de estrujar la prenda íntima, hizo una sopa que nadie tomó.
Su desafío más celebrado ocurrió hace 14 meses, cuando permaneció 25 horas dentro de un féretro instalado en los estudios de la emisora. Si aguanta, hoy a las 17.30, batirá su propio récord, con 30 horas dentro de un cajón.
La idea del "Churro" Rojas es echar la talla, hacer algo chistoso, diferente, celebrar los siete años de la radio y, de paso, ayudar a los más necesitados. Invitó a sus auditores a colaborar con alimentos no perecibles que entregarán a los viejitos del Hogar de Cristo. Y por eso cuentan con el apoyo de la muni y de toda la comunidad que le avivarán la cueca.
Funerarias Farías se rajó, igual que la vez anterior, con el cajón que diseñó especialmente para que el "Churro" se sienta cómodo y pueda maniobrar el micrófono con ambas manos.
El locutor con 30 años de carrera, y tres en su pega actual, no se limitará a yacer dentro de la urna como un muerto común y corriente, ¡No! Participará de todos los programas que acompañen su calvario.
En el día fue visitado por varios artistas, entre ellos la Chaparrita, una versión rural más rubia y voluptuosa de la Rancherita. También lo iba a ver Peñe Teñe, el humorista autóctono que era habitual en el Venga Conmigo del Pollo Fuentes.
Para que el animador no se muera de sueño durante la noche programaron lo mejor. La producción de la radio se consiguió un fierro de topless, donde tres minas que trabajan en un café con piernas le darán ánimo con el baile del caño.
El mayor inconveniente de Rojas es que la semana pasada estuvo mal del estómago. "El desafío era el lunes pasado y se debió postergar porque tenía diarrea", confesó.
Como aún no se le afirmaba la guatita fue al doctor para que le diera permiso y encarar su desafío.
Su evacuación líquida también es un tema, porque nadie puede permanecer tanto tiempo sin hacer pipí. Churro a veces orina sentado para no mancharse los zapatos y cuando está hinchado lo hace de oído, pero ahora deberá cerrar la llave de paso durante mucho rato.
Desde la comodidad del cajón nos respondió algunas dudas tan interesantes como la siguiente:
- ¿Podrá hacer pipí, aguantará o usará pañales?
- Cada diez horas puedo ir diez minutos al baño a hacer lo que quiera.
- ¿Cómo se preparó física y sicológicamente para su desafío?
- Ayer (domingo) me comí una cazuelita, además me quedé con el cajón que usé el año pasado y cuando llego medio puesto a mi casa, mi señora me manda a dormir ahí, así que ya tengo bastante práctica.
- ¿Cuando muera en qué formato prefiere pasar al otro mundo?
- Prefiero que me entierren a que me cremen, porque ya tengo experiencia.