Los "bayguáter" de Cartagena corretean a chorongos y tiburones de la playa

Son los salvavidas más choros y parados en la hilacha de la costa chilena.

Desde el 15 de diciembre hasta la primera quincena de marzo deben lidiar con una insigne fauna de cufifos, lanzas playeros, jotes, pintamonos y tiburones de tierra. Pero orgullosos se jactan de mantener a los más odiosines más cortitos que patada de chancho.

Son los indómitos "Guardianes de la Bahía" del balneario más popular del terruño: Playa Grande de Cartagena. Aunque son conocidos por los bañistas como "Los Bayguáter" del litoral central.

RÉCORD

Los cototos guarda-vidas se quiebran como una oblea al momento de hablar de cifras: "Llevo diez años acá y cero muerto hasta el momento. Acá no se ahoga nadie", saca pechuga Nano Madariaga (37), "El Pituto".

El guarda playa es líder de los fornidos hombrones de naranja y algo así como el David Hasselhoff de la californiana serie de tevé "Baywatch". ¡Claro que aquí no hay Pame Anderson!

Sus corajudos ayudantes son Jaime Zamorano (38), "El Tetera"; Marco Robledo (22), "El Fome", y Víctor Figueroa, "El Feña" (34). Los cuatro tienen la atenta mirada sobre más de 800 metros de arena y sol, más la playa El Porvenir que está pegadita a la Playa Grande.

Los "Bayguáter" son nacidos y criados en el popular balneario y en el invierno se defienden como buzos mariscadores.

"Hay que ser guapo y choro para trabajar aquí. No faltan los flaites y los porfiados. El otro día un chistosito se metió en pelotas al agua. Lo saqué a puros paipazos", indicó "El Feña" sin despegar los ojos de la orilla.

FARÁNDULA

Frente al sofocante calor estival, el viento, la arena y los constantes atados de los bañistas, los Guardianes de Cartagua hacen de tripas corazón y juran de abdomen en la terraza, frente a la Virgen, que no se desesperan.

"Así es la pega nomás y hay que apechugar", dice "El Fome". Claro que no todo es disciplina en la popular playa de arenas negras y aguas donde reposa uno que otro submarino. También hay tiempo para pinchar y refrescarse: "De vez en cuando aparecen unos filetitos de guatita al sol. Y a veces pasamos el calor con un poquito de melón con vino", explica "El Feña".

Pero sin duda que el grupo que ellos denominan "La Farándula" es el que más los entretiene.

"Así le decimos al piño de hippies chichas que toman, comen y duermen en la playa. Se portan bien. Saben que si hacen atados los tiramos al agua y no les gusta mucho", contó tallero el Nano.

Ronald Henríquez M.

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