Tan buena era la campaña que tenía Luis Musrri en San Antonio, que todos sus rivales directos estaban esperando que se cayera en la Segunda Profesional. Pero para malacué del equipo del puerto, el cuadro sensación se vino a pique de la peor forma.
La visita del SAU a Melipilla se vivía a pura alegría. Cientos de hinchas lilas se habían trasladado hasta el estadio Roberto Bravo para ver a su elenco, que es la vedette del campeonato. Más aún cuando el sábado Puerto Montt había vencido a Linares como visitante y los había alcanzado en la tabla, por lo que el triunfo tenía que venir sí o sí.
Pero la alegría duró poquito. En cancha todo iba mal para el SAU, porque los "Potros" les embocaron un 3-1 que los dejó lona. Pero lo brígido vino casi al final, cuando Isaías Peralta recibió una falta de Matías Celis y ardió Troya. Combos iban y venían. Patadas voladoras, gente que no tenía nada que ver estaba metida dentro de la cancha y hasta sapearon que un chipamogli con corta pluma andaba tirando sablazos por todos lados.
"En cancha no te puedo decir nada, porque perdimos bien. Pero lo que pasó después es algo impresentable. Hubo un ambiente hostil con nuestra gente y hasta con nosotros desde que llegamos al estadio de Melipilla, donde fuimos provocados en todo momento", disparó Luis Musrri, deté del SAU, a La Cuarta.
- La dura: ¿Repartió algo o no, profe?
- A mí me habían expulsado y aún no entiendo el motivo. Chutié una pelota y me echaron. Yo estaba en las galerías cuando comenzó todo y cuando logré entrar a la cancha ya habían parado.
- ¿Se acuerda cómo partió la sorround?
- Isaías Peralta recibe una falta de fútbol y el rival reaccionó mal. Hubo golpes y todos se metieron.
- ¿Qué le dijeron sus cabros?
- Sabíamos que nos iban a buscar. El error nuestro fue caer en esas provocaciones. Íbamos perdiendo y la frustración hizo que nuestros jugadores pensaran mal. Pero ellos nos buscaron. Ahora sólo nosotros somos los perjudicados, porque peleamos el torneo y nos alcanzaron.
- ¿Habló con Nelson Cossio (DT de Melipilla?
- Con él no hablaré nunca más en mi vida. Lo saludé por el respeto que fuimos compañeros en la ‘U’. Él incitó a la gente que entrara a la cancha y peleara. Después se hizo el tonto y llamó a todos a pelear, hasta los jugadores que no estaban citados. Su cuerpo técnico hacía burla a nuestra gente. A mí me hicieron hasta unos “Pato Yáñez”, eso es incitar a la violencia.
- Se viene el callampón. ¿Cómo se van a defender?
- Tenemos fotos, videos y todo para lograr defender a los nuestros y que fuimos provocados.
- ¿Hubo armas blancas?
- Mis jugadores así me dijeron, que era alguien de Melipilla. No sé qué pondrá el árbitro en su informe, que además fue todo malo su trabajo, pero espero que denuncie lo que vio.
