Todo mal en el Colo: Campeones del 91 hacen pebre a Octavio Rivero

El llanto que se pegó Octavio Rivero por su frustrada partida a Belgrano no cayó bien en los campeones de América.

Los ídolos del 91 creen que la pataleta del uruguayo es más rasca que etiquetar la marca de un artículo robado en Instagram, pa' conseguirse un canje. ¡Último poh, galla!

"Esas cosas se arreglan entre cuatro paredes y se quedan ahí, en el camarín, porque solo se presta para malos entendidos", soltó Juan Carlos Peralta.

Y su compañero Daniel Morón fue más allá: "El tiene un contrato con la institución y debe respetarlo, porque nadie le puso la pistola en la cabeza para que lo firmara".

50

mil dólares era lo que pretendía ganar Octavio Rivero, pero ByN no le subirá el sueldo y por ahora es difícil que le extienda su contrato más allá de 2018.

Momento preciso para que Gabriel Mendoza interviniera y escribiera su epitafio: "Hay que poner en la balanza a ambas instituciones. ¿Belgrano o Colo Colo? No hay por dónde perderse, este es el club más grande de Chile".

Por lo mismo, ninguno le perdona que no se haya presentado a jugar el domingo pasado, cuando Pablo Guede no tenía delanteros en El Teniente.

"Eso es lo más reprochable... Él firmó con una cláusula que no era fácil y si alguien la paga, listo. ¡Déjate de joder!", lo mató el "Loro". Mientras que el "Coca" adelantó lo que pasará en el Monumental: "Se va a sentir el molestar de la hinchada por su comportamiento".

La palada final la puso ByN. Tras reunirse con el jugador, la directiva comunicó que el conjunto argentino no puede pagar el dinero de su pase (un palo y medio verde), amonestó por escrito al pepero y castigó a su representante. "Al faltarle el respeto a nuestra institución, el señor Federico Pamparatto ha quedado inhabilitado de sostener cualquier relación profesional con Colo Colo", concluyó el escrito.

Álvaro Salazar también pataleó

Se apaga un incendio y comienza otro. Así están las cosas en Colo Colo, porque ayer Álvaro Salazar también pataleó por su vale otro.

"Por ahí me pongo en el lugar de que han pasado muchas cosas en el club. Desde La Serena en adelante no han sido semanas tranquilas y por ahí entiendo el trajín del club pero estamos con la paciencia un poco a tope, esperando que esta semana de me diga si por al fin se me va a renovar o si estoy viviendo mis últimos meses en el club", soltó el portero.

Cabe recordar que Salazar termina su vínculo en diciembre.

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