Autocuidado y fuerte fiscalización serán vital para evitar tragedias. Alcaldes piden patear las aperturas para la "fase 3" del Paso a Paso.
"Vine a pasear un rato porque ya estábamos aburridos en la casa. Aprovechamos de salir a tomar aire y ver si podemos comprarle algo a la niña que ya no tiene ropa. Sirve para despejarse un rato, después del encierro. Eso sí, saqué todos los permisos para venir". Con estas palabras, Camilo Castro (23) justificó su levantada temprano junto a su pareja y su pequeña niña, para tomar el metro y viajar desde Pudahuel hasta Providencia para estar presente en la reapertura del mall Costanera Center.
Al igual que el joven padre, cientos de personas se dieron cita ayer en centro comercial, que decidió abrir sus puertas con aforo reducido al 50% y estrictas medidas de seguridad (ver recuadro). Sin embargo, los expertos en salud y movilidad no ven con muy buenos ojos la apertura de este tipo de centros comerciales en fase de transición. El alto flujo de personas, como el que se vio en la comercial china "Asia Pacífico" el lunes pasado, puede generar un rebrote del virus, y no solo en las comunas donde se ubican los recintos, sino que también puede expandirse a otros sectores de la Región Metropolitana.
"El mall tiene la capacidad de movilizar a la gente, porque no necesariamente las personas que van al Costanera viven en Providencia y sus trabajadores pueden ser todos de la comuna, pero sí recibe gente de otras, se puede transformar en un diseminador del contagio. Tienen un efecto multiplicador en otras comunas", comentó Lorena Hoffmeister, epidemióloga y directora de la Escuela de Salud Pública de la U. Mayor, quien además asegura que la naturaleza histórica del mall puede jugar en contra en el combate de la pandemia.
"El mall es un espacio cerrado, que está pensado para que la gente haga un recorrido extenso. Su arquitectura está pensada para que la gente permanezca un buen rato en su interior. Es un lugar de encuentro, de paseo y sociabilidad, no necesariamente de compra. Entonces reúne los elementos para generar aglomeración y que el contagio persona a persona sea súper probable", sostuvo la profesional.
Ignacio Silva, infectólogo y académico de Postgrados Facimed de Usach, indicó que "cuando se pierde el temor a salir, el riesgo es lo que pasa en comunas donde se ha desconfinado, en donde hay mucha gente en la calle, en centros comerciales, algunos de ellos como fuente de trabajo -y eso es justificable- sin embargo, muchos, como forma de entretención y paseo. Y es fundamental que lo que más se debe evitar son los hacinamientos o lugares poco ventilados. Me parece que es muy riesgoso, sobre todo si no se hace con la fiscalización adecuada, la cual debe ser previa y no posterior".
Trabajadores. Entre los trabajadores de distintos centros comerciales, la opinión sobre volver a la pega en pandemia es dividida. Algunos aplauden la medida, considerando la importante crisis económica que vive el país, pero otros lo ven con preocupación ya que la demanda por comprar puede generar aglomeraciones.
"No estoy de acuerdo en volver a trabajar, y no porque no me guste mi trabajo, pero me cuesta confiar en el criterio de la gente. Mientras no exista el autocuidado real y la voluntad de las empresas para crear reales medidas sanitarias estaremos al borde del rebrote", comentó Matías, vendedor de una juguetería de venta al mayor y al detalle de Estación Central.
Movilidad. Con el tumulto de personas que se registró el lunes en Santiago, más de alguna autoridad se cuestionó el hecho de que en plena "transición", cuando el rebrote es una amenaza real, los centros comerciales vuelvan con atención al público. Algunos alcaldes ya piden que los malls solo puedan abrir en la fase 3, la de "preparación".
"Habiendo más de mil casos diarios y sin una disminución en la cantidad de muertos, tomar medidas de desconfinamiento son apresuradas y arriesgadas. Las aglomeraciones son esperables después del confinamiento y más aún con ofertas que el comercio tiene derecho a establecer. Pero más que echarle la culpa a alguien, es importante plantearse el hecho del autocuidado. Si veo una aglomeración de gente, por mucho que haya oferta, es preferible no exponerse", comentó Alejandro Velásquez, infectólogo de la Unidad de Paciente Crítico de Clínica Indisa.
Otro de los puntos de conflicto que incluye la apertura de centros comerciales en pandemia es la gran congestión vehicular que se genera en los alrededores, ya sea por transporte público o privado. Solo el lunes, con la apertura de Santiago y Estación Central, el flujo vehicular aumentó un 11%.
"Los centros comerciales que están en zonas donde los viajes se hacen por transportes público tiene un impacto en la movilidad, por lo tanto creo que hay que revisar con mucho cuidado el impacto que tiene en el hacinamiento de todas las personas que se mueven en el transporte para llegar al centro comercial. Es una cuestión que debía ser considerado antes de decidir qué mall se abre y cuál no", planteó Carlos Melo, ex subsecretario de Transportes y y director del Centro de Ingeniería y Políticas Públicas de la U. San Sebastián.
Alcaldes piden abrir en fase 3
Después de la caótica apertura del centro comercial "Asia Pacífico", que terminó con el local clausurado y un sumario sanitario en curso, los alcaldes de Santiago y Estación Central pidieron al gobierno postergar la apertura de este tipo de comercio solo para la fase 3 del plan "Paso a Paso" y diferir horarios en el comercio mayorista. "No queremos que las escenas que vimos en el centro comercial de Alameda con Maipú se repitan en otros puntos de la comuna ni en ningún otro centro comercial del país", comentó Felipe Alessandri, jefe comunal de Santiago.
Costanera Center dio la pasada a media máquina
A las 10:30 en punto, y después de cinco meses sin funcionamiento por la pandemia del coronavirus, el mall Costanera Center reabrió sus puertas para atención al público. En los primeros días de funcionamiento solo atenderá el 30% de las tiendas y con la obligación de que los trabajadores que operen vivan en comunas que no están en cuarentena.
Además, como gran medida sanitaria, está la reducción de aforo en un 50%, es decir, 3.522 personas. Eso sí, se anunció una fuerte fiscalización para que los locatarios cumplan con las medidas sanitarias y para evitar que personas de comunas en cuarentena transiten por el sector.
"Hoy día ha andado bien, vamos a estar fiscalizando muy fuertemente, se trata de ir abriendo paulatinamente, lo primero es la seguridad y salud de las personas que trabajan acá y de los que vienen a comprar y de nuestros vecinos", sostuvo Evelyn Matthei, alcaldesa de Providencia. La líder comunal aseguró que este proceso "no significa que vamos a dejar de fiscalizar, vamos a fiscalizar de forma muy fuerte, acá las multas pueden ser muy caras".