Paola Correa rompió el silencio para referirse al único imputado por el crimen de su hija.
A un mes del hallazgo del cuerpo de su hija, la mamá de Fernanda Maciel rompió el silencio para referirse a los beneficios de los que gozaría Felipe Rojas, único imputado por el crimen.
En el marco de una caminata al cerro, a modo de homenajear a "Fer", Paola Correa rogó por justicia y reiteró su principal petición a la fiscalía: la intervención en la bodega de Carlos Gutiérrez, perito del FBI que viajó desde Estados Unidos para trabajar en el caso.
"Esto es un homenaje que le estamos haciendo a mi hija para seguir metiendo bulla, para que se haga justicia, porque encuentro que es muy injusto que a esa persona (Felipe Rojas) se le den más beneficios que a mí, que yo soy la víctima. Mi hija está fallecida y él con vida. ¿Por qué a él sí y a mí no? Me siento 100% en desventaja", indicó Correa.
"En la reunión (con la fiscal) pregunté por qué ella no podía entrar (perito forense). Y ahora me enteré que a Carlos Gutiérrez no lo dejarán entrar", agregó, en entrevista con Hola Chile.
La furia de Paola
"Se supone que soy yo la víctima, mi hija salió de la casa caminando y ahora la voy a tener que entrar en un cajón. Eso es muy terrible para mí. Porque aquí la que sufría 14 meses, la que tuvo que aguantarle su saludo, aguantarle sus tallas (a Felipe), fui yo. nadie más que yo. Porque yo vivo al lado de la casa de él", cerró.