Mark González a lo largo de su carrera se ha transformado en el niño símbolo de las lesiones. Por lo mismo, el cabro está chato del temita y apostará por medicinas alternativas de la mano del sanador cubano José Ernesto Amador, quien trabaja con el deté de la Roja Jorge Sampaoli.
Por esto, el zurdo formado en la Cato se integró al bunker de Don Sampa para acelerar la recuperación de la dolencia originada por el extraño síndrome compartimental.
Recordemos que el volante del CSKA de Moscú pasó por pabellón en octubre, lo que le ha impedido actuar con su club y de paso ser considerado por el deté del Equipo de Todos. Las labores médicas de González fueron autorizadas por su club.
Cabe destacar, que el síndrome compartimental es una afección que implica un aumento de la presión a nivel muscular y que puede originar daños en los nervios y tejidos, junto a complicaciones en el flujo sanguíneo.