Martina Ahumada tiene catorce años y comenzó a practicar golf desde los 10. Estudia en la Escuela Amanda Labarca (Vitacura), pero vive en la Población Santa Victoria, de Huechuraba.
Martina Ahumada tiene catorce años y comenzó a practicar golf a los 10. Estudia en la Escuela Amanda Labarca (Vitacura), donde cursa primero medio, pero vive en la Población Santa Victoria, de Huechuraba.
Ahí vive con su familia, que llegó al sector hace 52 años, y a pesar de venir de un lugar donde no hay acceso a practicar este deporte de elite, la pequeña Martina creció entre palos de golf.
"A mí de chica me gustaba ir al trabajo de mi papá (en una tienda de golf), porque lo encontraba muy entretenido el tema de los palos de golf y así partió todo. Me llamaba mucho la atención cuando chica", relató.
Antes de intentar con el golf, la joven reconoció que quiso jugar fútbol, pero se desmotivó ya que no se consideró lo suficientemente buena.
"No veía mucho futuro ahí (en el fútbol). Y luego, en el colegio, habían talleres para golf y me inscribí. Después de un año, los que dirigían acá (Club de Polo y Equitación San Cristóbal) me becaron, eso fue hace cuatro años", confesó.
Su talento no pasó desapercibido y actualmente está becada por el Municipio de Huechuraba, al igual que todos los deportistas destacados de la comuna.
Su padre, Mario, es electromecánico y cuando quedó sin trabajo, llegó a trabajar a una tienda de golf. Contó que estos recursos entregados por el Municipio resultan vitales para la compra de implementos, transporte e inscripciones para los torneos. . "Ha sido vital para que ella pueda desarrollarse. Con lo que recibimos nos sirvió para pagar la inscripción anual y otra serie de gastos que se generan en este deporte", afirmó su padre.
Carlos Cuadrado, alcalde de Huechuraba, indicó que "una niña que juega golf, que es de nuestras poblaciones, de nuestra comuna, demuestra que es vital el derecho a hacer deportes".
Su desempeño hizo que también fuera becada en el Club de Polo y Equitación San Cristóbal. En este lugar tiene clases gratuitas tres veces por semana, además de la posibilidad de participar en campeonatos internos, campeonatos interclubes y usar canchas de práctica.
"Me gustan las competencias, me cuesta un poco superar a mis rivales, porque algunas llevan años, pero me gusta verlas, porque siento que podría llegar a alcanzarlas en el futuro. Mi idea es estar cuatro y en el futuro seguir jugando", contó Martina, quién actualmente está sexta en el ranking nacional de Golf Juniors de Chile.
Dentro de sus hobbies, Martina es músico autodidacta (teclado, guitarra acústica y eléctrica, ukulele). Es muy buena en inglés, donde se esfuerza bastante, pues sabe que en el futuro lo necesitará, si clasifica para todos internacionales.
Debido a su gran momento, hace un mes fue convocada por la Federación Chilena de Golf para clases de alto rendimiento, las que también se llevan a cabo en el Club de Polo y Equitación San Cristóbal.
Gastón Massa-Torche Paffetti, kinesiólogo y entrenador Área Física del club, aseguró que Martina es "bien matea, se destaca en hacer los ejercicios hasta que le resulte. Queda camino por delante, pero va bien encaminada".
Sobre su desempeño, Martina detalló que "no me costó acostumbrarme, porque creo que desde que empecé a jugar no soy mala. Hago bien los ejercicios, a veces tengo fallas, pero nada que no se pueda superar. Mi sueño es seguir jugando y perfeccionarme".