Una buena y una mala tuvo el Sifup. Se fueron de champañazo, porque al final el Loquito Bielsa confirmó que va a dirigir a la Roja en el amistoso ante los gallegos, el 27 de diciembre. El chifli exigió armar de su puño y letra la lista de nominados y, obviamente, quiere tener a la mayoría de los que aperran en las eliminatorias. ¿Y lo malo? El Matador al final arrugó, pese a que tiempo atrás había avisado que de allá era. Salas metió las famosas "razones familiares" para correrse.