La noche del 17 de enero, tras la muerte del comisario Valdés, Luis Vásquez Villenas se dirigió hasta el domicilio de su pareja. Una residente del block dijo haberlo visto todo.
Nuevos antecedentes se dan a conocer en torno al crimen del comisario Daniel Valdés Donoso, quien fue baleado por un desconocido el pasado 17 de enero en la comuna de La Cisterna.
Hasta el momento, el principal sospechoso del homicidio es Luis Vásquez Villenas, apodado Lucho Plátano, quien ya se encuentra en prisión preventiva luego de permanecer prófugo durante 22 días.
Según reveló La Tercera PM, el imputado habría confesado la autoría del crimen, de acuerdo a una testigo clave.
Ante los investigadores, la pareja de Vásquez Villenas, María Jesús Fernández Uribe, detalló que “ese día estuve con mi hijo, hasta que como las 01.00 horas del 18 de enero, cuando repentinamente llegó el Lucho al block, alcanzando a escuchar que la gente estaba alterada. En ese instante me llamó la Gisselle, quien es del departamento 34 del block 2, quien me dijo que habían matado a un rati y que parece que había sido el Lucho, por lo que me asusté, me empecé a vestir”.
“Saliendo del block me encontré con la mamá de él, quien se presentó como Karina. Me dijo que ella sabía que el Lucho estaba en el block y que en Sosafe salía que le había pegado a alguien de la PDI y que aparte tenía más homicidios, a lo que le dije que hablara con él, y luego me fui a una casa que me pasaron para protegerme”, agregó la joven de 27 años.
Escuchó confesión del crimen
Además, una vecina del mismo sector declaró ante la PDI haber escuchado cuando “Lucho Plátano” confesó el crimen.
“Cuando Lucho hablaba con su mamá, yo junto a Damaris y Julio (supuestos compañeros de delito del principal sospechoso del homicidio del detective) nos entramos a nuestro departamento, mientras que María Jesús (polola de Lucho Plátano) fue a su departamento y sacó una mochila color verde con varios bolsillos, dirigiéndose hasta nuestro departamento, solicitándole a Julio si podía guardar la mochila, que contenía varias pistolas en su interior, a lo que Julio accedió y en tan sólo un par de minutos llegó Lucho al lugar, contando de inmediato: ‘Vean las noticias, está la ca... Maté un rati’”, recordó.
Luego de escuchar la confesión de Vásquez Villenas, él y su pareja les mostraron el contenido de la mochila que habían encargado custodiar. “Exhibieron alrededor de siete a ocho pistolas. Y Lucho Plátano, además, portaba otra de color negro, la que mostró señalando que había matado a un funcionario PDI, y que también, le había robado su arma, sintiéndose orgulloso por esto”, agregó la mujer.
“Luego de unos 20 minutos de conversación, Lucho y María se fueron a su departamento, mientras que Julio y Damaris sacaron las pistolas del bolso y nos sacamos fotografías con ellas, recuerdo además que Lucho traía un chaleco antibalas, el cual también dejó donde Julio. Luego de unos 10 minutos, volvieron a nuestro departamento y nosotros dejamos las armas tal cual ellos las habían dejado. Es en ese instante donde María llamó por video llamada a Lisandro (narcotraficante conocido en el sector, según ella misma declaró) quien se encuentra en Argentina, ofreciéndole a la venta todas esas armas”, continuó la vecina.
Asimismo, la mujer aseguró que “Lucho Plátano le dio la orden a Damaris y Julito para que llamaran al taxista que lo trasladó en el homicidio y que lo amenazaran de que no entregara información, por lo que Damaris se comunicó vía llamada con él, diciéndole que si lo tomaban detenido, tenía que decir que dejó a Lucho Plátano en otro lado, que no sapeara, sin embargo, el chofer solo respondía ‘alo alo’, por lo que entre Julio y Damaris le mandaron diversos mensajes en WhatsApp, pero el chofer no contestaba, por lo que nos dimos cuenta de que estaba con la policía”.
Cabe recordar que, además de Vásquez Villenas, por el crimen del comisario Valdés fueron formalizados Gabriel Inostroza Morales, Antonia Cofré Morales y Bryan Olivares Barrios, imputados por colaborar en la huida y ocultamiento del principal sospechoso.