De acuerdo a las primeras pericias, el cuerpo de la víctima de 67 años presentaba varias lesiones distintas a las que causaron su muerte.
Nuevos antecedentes se dan a conocer acerca del secuestro extorsivo y homicidio de un hombre de 67 años en la ciudad de Iquique, en la Región de Tarapacá.
Primero, se confirmó la identidad de la víctima: Nelson Murúa Páez, un comerciante local.
De acuerdo a las pesquisas, el hecho se habría originado el pasado jueves 6 de enero, cuando la víctima salió de su casa para hacer unos trámites en el centro de la ciudad. De ahí en más, su paradero fue un misterio.
Según reveló La Tercera, en la madrugada del viernes 7, su familia decidió interponer una denuncia por presunta desgracia en la PDI. Horas más tarde, ya en la mañana, el hijo del comerciante recibió un mensaje sospechoso a su celular.
Desde un número desconocido, le pedían $57 millones a cambio de la libertad de su progenitor. Sin embargo, la cifra resultó muy elevada para la realidad de su familia.
De acuerdo al citado medio, la banda antisocial le pidió a los cercanos del comerciante que hicieran la transacción en Bolivia, pero no aceptaron.
Posteriormente, los delincuentes cumplieron con sus amenazas y abandonaron el cuerpo de Nelson Murúa en una toma ubicada en Alto Hospicio.
Posible causa de muerte
El hallazgo del cadáver se concretó al mediodía del sábado 8 de enero por funcionarios de la PDI, gracias a la georreferenciación de una foto que los secuestradores enviaron a su interlocutor extorsionado.
Respecto a la causa de muerte, sería por traumatismo cervical y torácico por arma cortopunzante; es decir, habría sido apuñalado. Eso sí, el cuerpo presentaba varias lesiones.
Sobre el crimen, el fiscal regional de Tarapacá, Raúl Arancibia, reconoció que “una experiencia nueva, nunca habíamos tenido un secuestro así en la zona. Se habían dado casos de retenciones entre bandas criminales, pero cuando le ocurre a un ciudadano que no está relacionado con la delincuencia es un hecho grave”, dijo.
Cabe destacar que aún no hay detenidos por el crimen, pero los sospechosos serían extranjeros y habrían ingresado de forma irregular a Chile.