Relatores hay muchos, pero "cantagoles" uno solo. Claro, de una a usted se le vino a la mente y sus oídos la voz de Vladimiro Mimica y su narración en históricos momentos deportivos, ¿pero qué sentiría si le contamos que ese mismo timbre lo podrá volver a escuchar para el Superclásico?
Fue el programa "Conclave Deportivo", de radio La Clave, el que hizo todas las gestiones para que Mimica pudiera tener una despedida del fierro como corresponde, y el hombre aceptó la invitación.
"Al comienzo lo vi con distancia. Luego esto fue creciendo de manera impresionante y con la invitación de la radio dije 'bueno, tengo pulmones, fuerzas, voz... voy a hacerlo', para que sea el último partido, un clásico del fútbol chileno, así que viajaré desde Punta Arenas", soltó Mimica a La Cuarta.
- Los hinchas lo recuedan con cariño...
- Eso es lo que me motiva realmente a tomar una determinación así. Cuando relaté mi último partido, antes de la campaña como candidato a alcalde, fue la final entre Colo Colo y Everton en Viña del Mar, y pensé que me iba a despedir con un Colo Colo campeón. Bueno, yo creo que para la hinchada colocolina quedó una tarea pendiente.
- ¿Lo habían tentado para volver?
- Agradezco a muchos medios, porque me hicieron ofertas, pero a todos les dije que no. Lo de ahora no significa que yo vuelva a relatar al fútbol, será algo muy simbólico, la despedida por mi paso por las comunicaciones durante 45 años.
- ¿Ya se está preparando?
- Espero que Dios me ayude. Yo igual tengo una radio en Punta Arenas, radio Antártica, donde estoy todos los días. Pero bueno, yo creo aún tener los pulmones, la vista, no he olvidado el vocabulario... Es un desafío, porque hay una generación completa de hinchas donde sus papás o sus abuelos les contaron de mis relatos y ellos no me han conocido. Es un arma de doble filo, porque no será que decepcione a esos niños y después digan 'esto es de lo que ustedes hablaban'.
DUPLA HISTÓRICA
- ¿Quién lo acompañará?
- Le pedí a Carlos Caszely, que fue mi comentarista en la Copa Libertadores y durante muchos años en varias radios.
- ¿Es especial volver a las canchas?
- Despedirme en el Nacional es importate. Igual para mí el Monumental tiene otro condimento, yo estuve cerca de la construcción e inauguración de ese estadio que es parte de la historia. El Nacional también lo es, para bien y para mal. Yo fui preso político en el Estadio Nacional y despedirme allí, donde fuimos violentados, me deja muchas cosas.
- ¿Le quedó algún sueño por relatar?
- Sí, claro. Me hubiese gustado, como tuve la satisfacción de relatar la Copa Libertadores de América, haber transmitido un título continental con Chile. Estuve en Francia 1998, en el de España 1982, pero me faltó la güinda de la torta, que fue relatar a Chile campeón de Copa América. Me hubiese gustado estar con el equipo ahora que llega a fases finales de campeonatos, pero ya no pudo ser, que disfruten los que puedan.
- ¿A quién le dedica este último relato?
- El relato final primero será para mi familia, que me soportó por varios años, a todos. Fundamentalmente a la Tania, que ella nació justo el día que Chile jugó contra Ecuador bajo una lluvia torrencial con Nelson Acosta en el camino de Francia 1998. Y bueno, ahora me hubiese gustado que me acompañara en esta, porque lo hacía siempre. Por eso digo para toda la familia, pero también para todos los hinchas del fútbol, a todos los chilenos que alguna vez quisieron el fútbol y me escucharon, pero también al pueblo albo, que tiene todo mi cariño, afecto y reconocimiento.