El 5 de agosto del 2010 quedó marcado a fuego en la mente de los 33 mineros que quedaron sepultados a más de 700 metros y durante 70 días en la Mina San José, ubicada a 30 km al noroeste de Copiapó.
Han pasado cerca de 5 años de esa tragedia, y de su feliz desenlace el 13 de octubre, que conmovió a todo un país y a más de 1.300 millones de personas desperdigadas por el planeta, y la catástrofe vuelve a golpear a "Los 33 de Atacama". Especialmente a los que residen en Copiapó.
Ayer Luis Urzúa, Juan Carlos Aguilar y Jorge Galleguillos, se encontraban en la sede de la fundación de los titanes de la San José, donde planifican actividades como los tours guiados al histórico yacimiento. Desde allí, y todavía profundamente consternados con el "tsunami de barro", contaron que no han sabido de alguna mala noticia respecto a "Los 33".
Además el trío denunció principalmente a los "usureros" que han subido los precios de los elementos esenciales para sobrevivir, especulando con el dolor y la necesidad de la barra copiapina.
El ex jefe de turno, Luis Urzúa, contó a La Cuarta que los caminos a la mina San José están cortados y que teme por la vida del único habitante del yacimiento clausurado: ¡El guardia que estaba de turno!
"No hemos tenido noticias de él. Está aislado", remachó el líder de los 33.
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Mario Sepúlveda, vocero de los 33
"Estoy consiguiéndome un camión para llevarlo lleno con cosas a Copiapó. Estoy armando una campaña para juntar colchones, frazadas, agua y otras cosas. No me voy a quedar con los brazos cruzados y voy a hacer algo. Quiero llevarle buena onda a mis viejitos de Copiapó. A mis compañeros mineros".
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Luis Urzúa, el líder del grupo
"La Mina San José quedó aislada. Los caminos están inhabilitados y no hay comunicación. Hasta este fin de semana hacía turismo a la mina. Con esto está todo parado y no sabemos cómo está el guardia que cuida la mina. Esperamos que esté bien. Es que él estaba sólo allí. Otra cosa que me preocupa es como han subido el precio del agua. De 2 mil a 8 mil pesos el bidón. Es una sinvergüenzura".
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Jorge Galleguillos, era perforista
"Quiero denunciar a los usureros. Además del agua, algunos han subido la tarifa de los colectivos, la azúcar, las velas y el petróleo. Hay que apoyar a la gente y no aprovecharse de ella. Ahora quiero ver cómo se vendrá el palo que pagarán con la verdura. En todo caso, no todos los comerciantes son así por acá".
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Juan Carlos Aguilar, era supervisor de la mina
"Yo me vine de visita a ver a mis colegas desde la región de Los Lagos en el sur. Allá falta agua y acá me vengo a encontrar con esta situación. ¡Estamos varados en Copiapó!. Como no hay petróleo en los servicientros, subieron el precio y el de las bebidas también. Pero no todos los copiapinos son así. Hay que recordar que hace cinco años se armó acá una gran cadena de solidaridad con nosotros".
