Daniel Morón irrumpió en el escenario de Colo Colo haciendo pebre a Paulo Garcés. En conversación con otro medio nacional, el Loro aparecía destrozando al Halcón luego de los constantes errores en el arco del Eterno. Sin embargo, ahora fue el mismo campeón de América quien aprovechó las pantallas de #GolazoPop para aclarar lo sucedido.
"Lo que pasa que en el arco de Colo Colo no se permiten tanta cantidad de errores. Me han preguntado toda la semana por Paulo Garcés y ahora sale en El Mercurio, perdón que diga el nombre, pero sale que 'Morón destroza a Garcés'. La verdad es que me han sacado de contexto lo que dije. Si recuerdan yo salí a proteger a Garcés desde sus errores con Huachipato, Iquique y la U. Ahora, tampoco vamos a defender lo indefendible. Lo que quiero decir con esto es que el técnico tiene que tomar decisiones y si yo fuera técnico, por lo que veo desde afuera, le diría que él está sufriendo en el arco de Colo Colo, lo está pasando mal. Y eso puede conllevar a que cometa otro error y Colo Colo pierda", la tiró el histórico guardameta.
Uno de los problemas que ve Morón en Paulo Garcés es que nunca le pone una pausa a su juego, algo que cree necesario que debe tener un portero.
"Garcés juega todo a mil. Es como cuando uno maneja. Hay momentos en que tengo que ir a 80, a 40 o 120. Garcés juega todo a 120, así se lesionó. Fue con vehemencia y se lesionó. Con Iquique no sé por qué hace eso, no entiendo cuál es esa necesidad de querer descolgar un balón y sacar rápido. Ahí tienen que estar los que trabajan con él para decirle lo que está bien y mal", diagnosticó.
"Yo considero que si esa pelota que Garcés no atrapa ante San Luis va con un defensa o un delantero de por medio te creo, pero para nosotros que jugamos en ese puesto sabemos que era una pelota muy fácil. Aunque también tienen que entender que un jugador no pierde un partido sino que es porque Colo Colo jugó como las pelotas todo el partido, disculpenme la palabra. Aquí lamentablemente no se iluminó nadie y se crucifica al arquero porque su error fue evidente, pero Colo Colo estaba jugando mal. Por eso Guede no puede decir que jugaba bien. Yo no estoy atacando a Garcés, yo quiero que el técnico haga algo porque el chico juega aterrorizado, juega con mucho miedo.", descaseteó cerrando la polémica.
Álvaro Salazar
A lo que apuntó Morón fue netamente al cambio que cree que necesita el arco de Colo Colo para, por una parte, darle su merecida oportunidad a Álvaro Salazar, y por otra dejar que Paulo Garcés sane mentalmente para que vuelva en gloria y majestad más adelante.
"Si tú como técnico pediste que un tercer arquero se quedara en la institución tienes que darle la oportunidad, más si estamos en esta situación", confesó.
Obviamente la pregunta caía de cajón: ¿será necesario alinear a un canterano justo cuando el Cacique pelea la punta del torneo con el archirrival?
"Voy a poner un ejemplo. ¿Cómo apareció Claudio Bravo o Eduardo Lobos? En la quiebra, cuando eran pendejos. Los primeros 5 partidos de Claudio Bravo fueron horribles, pero tenemos que darle la oportunidad. Si vos no le das oportunidades, jamás vas a tener la experiencia. En nuestro puesto necesitamos crecer así y Álvaro ya tiene partidos en primera y de titular", opinó.
Quería a Argentina como campeón de la Copa América
"En la Copa América iba por Argentina. En la primera copa también. Tengo hijos argentinos y chilenos y ver a mis hijos chilenos celebrar una copa fue de maravilla".
La "U" y la Copa Libertadores
"¿Que si me gustaría que la U gane la Libertadores? ¡¿Pero por qué no!? Yo vivo del fútbol, del fútbol chileno. Yo no soy de esos que vende humo con Colo Colo, ellos saben que quiero a la gente de Colo Colo. Pero eso no significa que le tenga que desear mal a los de la U o de la Católica. Aunque sí, estamos muy lejos de ganar otra Copa Libertadores".
Debut en el Eterno
"Lo que pasa es que cuando vienes de Argentina todavía el fútbol te representaba más, decían 'este viene del fútbol argentino'. Yo venía de un equipo chico que peleaba el descenso. Cuando me contrató Arturo Salah me dijo que había un chico que era titular (el Rambo Ramírez), que me tenía que preparar para cuando llegara la oportunidad. Lo que hacía yo era agarrar a mi hijo y me iba toda la tarde a hacer salto, arranque, pique, velocidad, todas las tardes. Y cuando me tocó jugar contra San Luis de Quillota la rompí. El segundo partido fue el clásico, 60 mil personas, estadio lleno. El 30% banderitas azules, 70 blancas. En un córner saqué la pelota en el aire lejos del arco y la descolgué entre dos delanteros. Sentí a la galería que exclamó 'uhhh'. Listo, dije yo, de aquí no me saca nadie".
Pelea con Boca
"Lo único que me interesaba en esa pelea era que estábamos pasando a la final. Sacaba a los de blanco porque no quería a ninguno afuera, los saqué a todos porque teníamos que jugar una final. En una le hicieron un avioncito al Chano Garrido y yo fui y lo saqué de la cintura. Había que poner la calma".
Los penales
"Es verdad, atajando penales era un desastre. Yo prefería encarar al delantero mano a mano que unos penales. Yo tenía confianza. En los penales pensaban en mi familia, mis hijos, me persignaba y siempre me tiraba para el lado contrario".
Marcelo Salas y su partida a River
"Salas me debería haber dado mi comisión por su venta a River. Con ese gol -cuando se manda un blooper y el Matador le hace 3 pepas- lo vendí. Yo no quise salir jugando en esa jugada, lo anticipé, pero me quedó para la pierna izquierda. Yo solo de casualidad me paro con la pierna izquierda".