Una dolorosa tragedia tuvo lugar ayer Romina Echeverría, una profesora chilena de 32 añitos que falleció atropellada en un confuso incidente. Pasada la una de la madrugada, ella estaba al volante de su auto junto a su amor, Matías Picado transitando por la Ruta 68 a la altura del kilómetro 30, cuando ambos advirtieron que el camino estaba bloqueado por una serie de palos y piedras. Romina decidió parar con el fin de averiguar qué pasaba, pero ahí comenzó el drama.
De la oscuridad surgieron tres sujetos armados, que según Carabineros, estaban con el rostro cubierto. Los apuntaron, golpearon y obligaron a bajar del auto, dejando a Romina y Matías quedaron a la vera del camino.
En ese momento, ella decidió pedir ayuda a los automovilistas que circulaban por la Ruta 68, y para ello decidió cruzar a oscuras y tratando de hacerles el quite a los vehículos a toda velocidad, decisión que terminó siendo fatal pues un Toyota que también venía de Santiago la atropelló, dejándola con heridas graves.
El vehículo era conducido por Reinaldo Portigo Hernández, quien al percatarse de lo ocurrido, le prestó la ayuda que pudo en esas circunstancias. La decisión adoptada fue trasladarla de urgencia al peaje Lo Prado, para que recibiera los primeros auxilios, pero los esfuerzos allí fueron infructuosos y Romina falleció en ese lugar.
Carabineros de la Tenencia de Carreteras de Curacaví constató después que Portigo conducía sin alcohol en su sangre, con sus documentos al día y que le prestó ayuda de inmediato. De igual forma el conductor fue detenido por los policías y quedó a la espera de ser citado a declarar por la Fiscalía.
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