Con una bolsa transparente en la que portaba parte de la blonda chasca que se le ha caído, la empresaria Alejandra Aburto se presentó ayer ante el Segundo Juzgado de Policía Local de Providencia, en el marco de la demanda por 49 millones de pesos que interpuso en contra del peluquero peloláis Sebastián Ferrer.

La mujer asegura que luego de que le retocaran las raíces en uno de los locales de la cadena de Ferrer, en el Portal Lyon, su pelo, igualito al de "Rapunzel", sufrió graves daños. Precisó que tendrán que pasar muchos años para volver a recuperar en todo su esplendor la cabellera de 78 centímetros de largo.

"Debido a cómo me dejaron no puedo salir a comer, ir al teatro o atender como corresponde mis negocios. Es súper triste tener el pelo así", indicó la mujer, quien fue modelo de "Sabados Gigantes".

Añadió que "mínimo espero que Ferrer me dé una explicación. Cuando hablé con él por teléfono me contestó muy mal y me levantó la voz". Al juzgado también llegó Verónica Padilla, esposa de Ferrer. Señaló que "este es un problema de educación, principios y valores, nada más".

Trascendió que la defensa de Ferrer ofreció un millón 200 mil pesos para lograr una solución. Parte de la cabellera podría ser sometida a peritajes químicos.

L. Vieyra