Aconsejada por su sicóloga y la necesidad de obtener una receta que la ayudara con su terapia, Paulina Sarabia (34) pidió una hora con el médico I.S., en el Cesfam de San Vicente de Tagua Tagua, Sexta Región.
La cita quedó lista para la mañana del 18 de diciembre. "Desde que llegué el médico me preguntó por otras cosas y lo que más le interesó fue mi dolor de espalda. Hizo que me diera vuelta, me manoseó y se sobajeó conmigo", contó.
Agregó que se sintió intimidada y contestó algunas interrogantes del doctor acerca de su vida sexual, hasta que le entró el alma al cuerpo y lo increpó. "Salí de ahí corriendo hacia la consulta de la señora Marcela, mi sicóloga, y le conté lo que había pasado", relató.
Nunca imaginó lo que vendría, según confesó. "Ella me dijo que era imposible, que conocía al médico de chico, después me culpó del incidente, porque yo andaba con short y polera".
Paulina señaló que le dijo a la sicóloga que denunciaría todo en redes sociales y ésta cambio de actitud. "Fijamos una reunión para el otro día con la directora del Cesfam. Cuento corto, nunca llegó y me hicieron una encerrona con el doctor", contó.
Muy complicada, manifestó que en ese momento no podía creer lo que le sucedía. "Al principio él negó todo, luego lo aceptó, lloró, suplicó y me terminó ofreciendo $4 millones para que yo cerrara la boca", señaló.
Al final la joven madre no aceptó la plata, pero sí accedió a la promesa de que el profesional redactaría una carta dirigida a la directora del centro médico donde reconocería el hecho y renunciaría. "Nunca sucedió, desde esa fecha está con licencia", aclaró.
Pero las sorpresas no habían terminado, contó la mujer de San Vicente de Tagua Tagua, pues cuando decidió ir por explicaciones al recinto asistencial se encontró con otro pastel. "Fui con la intención de hablar con mi sicóloga, ella había oído la confesión del doctor, pero apenas me vio me dijo que estaba ocupada y que no tenía nada que hacer. Fue atroz, porque durante mucho tiempo deposité toda mi confianza en ella, me dio rabia y le dije muy fuerte que 'no la hace menos mujer oírme' y ella llamó a Carabineros... me fui presa, humillada y lloré a mares", narró.
Finalmente, el pasado 21 de diciembre hizo la acusación en Carabineros y la Fiscalía. "En forma paralela recurrí a las redes sociales y de inmediato me llegaron historias de abusos de este mismo médico a decenas de mujeres y siguen llegando. Incluso, dentro de las abusadas hay una lolita que está embarazada y sufrió la mala experiencia la única vez que vio al médico solita", reveló Maritza.
Entre las afectadas, estaba Jeannette Contreras, quien también pasó por una experiencia parecida con ese mismo doctor. "En el 2016, fui al Cesfam a buscar una licencia de una persona postrada y me atendió el doctor I.S. me preguntó si yo andaba estresada. Me hizo masajes en el cuello, luego en la espalda y luego en la cintura… se sentó en la camilla, me dijo me que moviera y comenzó a rozarme sus genitales en mi trasero".
Agregó que "me asusté y me fui sin decir nada…me dio miedo, me sentí muy mal… no supe qué hacer".
Jenny, que prefiero no decir su apellido, también fue atendida por el doctor I.S. "Fui a un control de embarazo el año pasado, cuando tenía 14 semanas de gestación. Al principio creí que había sido sólo una impresión. Me hizo pararme de la silla para revisar supuestamente la tiroides y se puso atrás de mí y me rozó con sus partes. Me sentí súper mal.. Salí mal de ese control".
Las denuncias
Según la Fiscalía local de San Vicente de Tagua Tagua, actualmente existen ocho denuncias en contra del profesional en cuestión y todas son recientes.
La primera, que es anterior al caso de la mujer que dio a conocer su caso en redes sociales, es de noviembre del 2017. La segunda corresponde a la de Paulina y el resto son de fines de enero.
El Ministerio Público informó a La Cuarta que hasta ahora sólo hay una causa que tiene una diligencia solicitada y el fiscal a cargo es Claudio Meneses, profesional de delitos sexuales.
Paulina Sarabia relató que entre las mujeres que las contactaron había edades que iban desde los 15 hasta los 70 años, información que fue corroborada por la Fiscalía.
Según el organismo se está en una etapa inicial de investigación, pero que los relatos de las ocho supuestas víctimas coinciden íntegramente, pues todas manifiestan que el médico en cuestión les preguntaba por la espalda o ellas llegaban con problemas en esa parte del cuerpo.
Luego, en medio del examen, las abrazaba por atrás y cometía el abuso sexual, según la declaración de las mujeres afectadas.
"Se puso detrás mio mientras me rozaba"
Paz relató que llegó en noviembre pasado con fuertes dolores estomacales al Cesfam de San Vicente.
"El doctor I.S. (el que más tarde denuncié) me hace ponerme de pie y me hace ciertos movimientos para ver si yo me mareaba. Se pone detrás de mí me toma de los hombros y me hace hacia adelante y hacia atrás mientras sus genitales me rozaban".
Agregó que "esto se repitió por varios minutos, yo trataba de hacerle el quite y no sabía qué decir… uno se corta en el momento. Me hizo darme vuelta y me tomó por atrás y dijo que eran masajes, me dijo si me dolía o me gustaba".
Paz confesó que "después me senté rápidamente y le pregunté qué tenía que ver esto con mi dolencia".
Agregó que "luego me da su número de teléfono por cualquier cosa… yo salí y me demoré decirle a mi pareja un par de horas, pero después fuimos a hacer la denuncia".
La afectada señaló que "me citaron a la Fiscalía un mes después y cuando fui, el abogado y el sicólogo me dijeron que como yo era mayor de edad el delito de acoso sexual no podía ser porque yo me podía defender. Me sentí vulneraba y denuncié, pero ahí quedó todo".