Hace ya casi 19 años nuestro país la rompió a nivel internacional cuando a bordo del transbordador Columbia, de la NASA, viajaron al firmamento chinitas chilenas que comprobaron ser secas para controlar las plagas en el espacio.
Cómo olvidar al primer chileno que postuló para ser astronauta, Klaus von Storch, y que -según los expertos- somos por lejos los papis de la astronomía a nivel mundial.
Por eso fue justicia divina que la nueva Muñeca del Año, que se lanza cada 1 de enero en el mercado norteamericano, esta vez fuera chilena y aspirante a astronauta.
La American Girl del 2018 es Luciana Vega, una niña con una historia apasionante relatada en un libro escrito por Erin Teagan.
La pequeña Lucy tiene 11 años, es hija de chilenos y espera ser la primera mujer en llegar al planeta Marte y de paso "inspirar a otros a combatir los estereotipos y seguir sus sueños".
"Ella es una típica niña de 11 años, muy creativa e impulsiva, que le gusta pintarse las uñas, dibujar y salir con su mejor amigo Realyn. La historia se centra en que ella gana una beca para asistir a un campamento espacial en Huntsville, Alabama", relató la escritora al portal Women Talk.
De acuerdo al libro, Lucy y sus padres llegaron a Estados Unidos porque su mamá se ganó una beca para estudiar enfermería en la Universidad. Su abuelita y el resto de la familia aún viven en Chile.
La autora explicó que nuestro país está ultra presente en cada página de esta historia porque cuando comenzó a interiorizarse acerca de nuestra patria y trabajó con un experto en su cultura, "quedé sorprendida por el fuerte lazo que tiene el país con la astronomía. Ahí están los mejores telescopios del mundo y leí muchos artículos donde se les nombra como la 'capital de la astronomía", asegura Teagan.
¿Cómo hicieron la muñeca?
El libro que cuenta las peripecias de Luciana está dividido en tres tomos, trabajo que para la escritora significó largas horas y varios meses de investigación.
Teagan trabajó con expertos de la NASA, visitó el campamento espacial e incluso se sumergió en la piscina donde se entrena a los astronautas para darle vida a la niña.
Pero junto con narrar una apasionante crónica, Lucy quiere dejar un gran legado. Esto es que las niñas entiendan que pueden soñar en grande como lo hace ella.
"Me gustaría que los lectores se conecten con la historia, que hay un espacio para cumplir los sueños, como Luciana, que espera ser la primera mujer en llegar a Marte. Y que la ciencia no es exclusiva, sino para todos", confesó Teagan.
En la creación de Luciana también participaron la astronauta Meghan McArthur, quien fue al espacio y reparó el telescopio espacial Hubble, y la ex jefa de Científicos de la NASA, Ellen Stofan.
Javiera Arce: "El refuerzo debe comenzar cuando son niñas"
"Las niñas se dejan llevar por el sesgo de género que les plantean en sus hogares y por eso hay tan pocas de ellas en las ciencias duras", señaló a La Cuarta Javiera Arce Riffo, secretaria ejecutiva de la Unidad de Igualdad y Diversidad de la U. de Valparaíso.
Javiera contó que ella se ha involucrado en la promoción de las mujeres en Stem (áreas de la ciencia), pero "desgraciadamente la presencia de ellas es escasa, pues el refuerzo positivo debe empezar cuando son pequeñas. Hay cientos de estudios que lo demuestran", contó.
Señaló también que el Gobierno impulsó una campaña en diciembre del 2017 donde le preguntaron a científicas destacadas, qué juguete había que introducir en el área científica cuando niñas. "Los padres les habían regalado microscopios, por ejemplo. O sea habían determinado su interés en ciencia", reveló la integrante del grupo "Mujeres Futuro".
Klaus von Storch: "Es un reconocimiento a Chile"
Contento hasta la médula quedó el único aspirante a astronauta chileno, Klaus von Storch, con la noticia de que la muñeca gringa del año es nada más y nada menos que chilena.
El piloto explicó a La Cuarta que "esto es un reconocimiento a Chile por su gran aporte al estudio de la astronomía y si se elaboraba una muñeca astronauta, merecía ser chilena", dijo.
Agregó que nuestro país es mundialmente respetado por su aporte a la investigación del Universo.
"Tenemos uno de los mejores cielos del planeta para estudiar el firmamento y científicos de todo el mundo respetan nuestro trabajo", manifestó el ingeniero aeroespacial.
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