El paciente padecía una dolencia cardíaca terminal y según su esposa: “comenzó este viaje con la mente abierta. Sabía que su tiempo con nosotros era corto y esta era su última oportunidad de hacer algo por los demás”.
El 30 de octubre, falleció Lawrence Faucette, de 58 años, paciente que padecía una dolencia cardíaca terminal y recibió un trasplante corazón de cerdo genéticamente alterado en su pecho, el pasado 20 de septiembre.
Faucette es el segundo hombre en recibir un trasplante de este tipo, el primero fue David Bennett, quien logró vivir dos meses gracias al programa de xenotrasplantes. Ambos pacientes se pusieron en manos del Centro Médico de la Universidad de Maryland, en Baltimore, Estados Unidos.
Faucette era un funcionario del Instituto Nacional de Salud y durante las seis semanas posterior a la operación logró avances significativos, según informó la institución a través de un comunicado.
El hombre recibió tratamiento de fisioterapia, pudo pasar tiempo con su familia y hasta “jugó a las cartas con su esposa, Ann”. Sin embargo, en los últimos días, el corazón comenzó a mostrar rechazo y el 30 de octubre murió.
“Expresó un último deseo: que aprovecháramos al máximo lo que aprendido de su experiencia”
“Lamentamos la pérdida del señor Faucette, un paciente extraordinario, científico, veterano de la Marina y hombre de familia que solo quería pasar un poco más de tiempo con su amada esposa y con los suyos”, escribió Bartley P. Griffith, el cirujano.
Y en esta misma línea, agregó: “Expresó un último deseo: que aprovecháramos al máximo lo que aprendido de su experiencia, para que otros puedan tener garantizada la oportunidad de disponer de un corazón nuevo cuando un órgano humano no esté disponible. Tuvo tiempo de decir al equipo de médicos y enfermeras reunidos a su alrededor que nos quería. Lo extrañaremos muchísimo”.
Ann, la esposa, dijo que “comenzó este viaje con la mente abierta y total confianza en el doctor Griffith y su personal. Sabía que su tiempo con nosotros era corto y esta era su última oportunidad de hacer algo por los demás. Nunca imaginó que sobreviviría tanto ni que proporcionaría tantos datos al programa de xenotrasplantes. Siempre estaba pensando en los demás”.
Lee más en La Cuarta
- Delegación brasileña fue afectada por un robo en Villa Panamericana