En octubre del 2014 un lote de ocho neonazis participó de una barrida en la Plaza de Maipú, donde murió un joven punk.
Las pericias de carabineros dieron con la mayoría de los responsables de la muerte de Isaac Araya Herrera, de 37 años, pero desde entonces uno de los líderes del grupo, "Legión 38", Christopher Hidalgo, estaba prófugo.
Aquella fatídica noche los punk estaban tomando en la intersección de Pajaritos con 5 de Abril, cuando desde una camioneta bajó el grupo de pelados armados con sables y cuchillos, y sin mediar provocación atacaron a las personas que empinaban el codo.
El sujeto recién capturado, conocido como "El Bestia", estuvo fondeado más de 900 días hasta que la sección Prófugos de la Dirección de Investigación Criminal de la policía verde, lo agarró mientras acompañaba a su pareja a un control de maternidad en un Cesfam de El Bosque.
Durante el tiempo que estuvo escondido, Hidalgo se habría quedado donde familiares y amigos en la capital y en la región de Valpo, mientras que los cercanos a la víctima pedían que diera la cara.
Participación
Al momento de su detención, "La Bestia" dijo que sólo había participado de la golpiza, pero no del asesinato.
"Éste individuo fue uno de los que sujetó a la persona que es víctima del homicidio mientras es apuñalado por otro de los individuos", dijo el mayor Diego Rojas.
Por el homicidio, el autor material, Patricio Salas Villar, ya fue condenado a 13 años, y a otros involucrados le cayeron penas de menor cuantía.