Una terrible imagen mostró la NFL en la reciente fecha disputada el fin de semana. Es que el jugador Zach Miller sufrió una de las lesiones más escalofriantes.
El player de los Bears de Chicago recibió el balón en el campo de los Saints (el rival de turno), pero su caída fue de las peores: su rodilla izquierda se dobló dislocó inmediatamente.
Ante la gravedad del movimiento, los doctores temían que Miller perdiera la pierna. Por lo mismo fue operado inmediatamente.
Hasta ahora los voceros del club han dicho que el jugador de 33 años está mejor y que gracias a la rápida operación se pudo salvar la rodilla. Aunque todavía está en observación para ver como evoluciona.
Lo peor es que la recepción de Miller no fue contabilizada y su equipo cayó 20-12.