El lunes pasado se dio a conocer la sentencia definitiva para los cuatro imputados por el asesinato de Daniel Zamudio y la reacción de la barra frente a este hecho, demuestra que aún no se olvida del joven mártir de la discriminación.
En la tumba del joven, ubicada en la Galería 100 del Cementerio General de Santiago, los peluches, flores y mensajes, reafirman que su muerte caló hondo en la memoria de las personas y que su terrible caso hizo historia.
Las hermanas Rosa y Gabriela López, fueron a visitar a sus seres queridos al Cementerio General y aprovecharon de ir a saludar al muchacho asesinado por su opción sexual.
"Cada vez que venimos al cementerio, pasamos a verlo. Es que era tan jovencito y morir de esa manera tan cruel… a uno que es madre, le duele", dijo Rosa.
Gabriela agregó, "yo pensé que no lo iba a encontrar acá, porque supe que le estaban haciendo un memorial".
Ambas coinciden en que el caso Zamudio les tocó la fibra y que pasar a verlo les recuerda que no deben discriminar a nadie, ni por su físico, religión u opción sexual. Aseguran que, aunque no le dejan flores, rezan para que Daniel esté tranquilo y feliz, donde sea que esté.
Álvaro Bernales y Luis Marilao también quisieron visitar a Zamudio en el Día de Todos los Santos.
Estos amigos viajaron desde Rancagua sólo para ponerle flores al lugar donde descansan los restos del muchacho.
"Hace tiempo que teníamos ganas de venir y encontramos que ésta era la mejor fecha. Para nosotros su muerte fue un duro golpe", señaló Álvaro, a quien le cayeron sus lagrimones.
Otro que llegó hasta la Galería 100 fue Silio Laprida. Todos los domingos este hombre deja una rosa en el nicho de Zamudio y le pide que proteja a quienes son discriminados por su opción sexual.
"Su historia me conmovió, no entiendo cómo le pudieron quitar la vida. Yo soy igual que él, ya sabe a qué me refiero. Por eso me siento muy identificado con lo que sucedió", dijo.
