Esa llegada a lo rockstar del Nico, con el pelo bien corto y lleno de estáil con un corte de navaja, su aro de diamantes y una barba peliteñida, no solo dejó felices a los hinchas de los Pumas, sino también a la prensa charra que se hizo un festín con el último goleador del Apertura 2016, con 13 pepitas.
Y no es pa' menos, si apenas bajó del avión se rindió ante los micrófonos de los güeritos. Ahí Castillo, que en Chile no hablaba, avisó que su estadía en México será pa' ser figura y levantar su chipote chillón lo más alto posible.
"Me gustaría salir campeón acá también. Es lo que cada jugador quiere y aportaré mi granito de arena para cumplir el objetivo", sopló el renquino, que se pegó el manso ¡paf! cuando puso la liga cuate por sobre nuestro humilde torneo nacional.
El choro no tuvo empacho pa' soltar que el campeonato cuate "es una liga mejor que la chilena, porque hay muchos seleccionados de ditintos países".
Pa' rematar y antes de partir a hacerse los exámenes médicos al centro deportivo de los Pumas, donde se integrará hoy a los entrenamientos, el Nico recordó que será compañero de Bryan Rabello, uno de sus yuntas de mil batallas en la Rojita Sub 20 que fue al Mundial de Turquía.
"No hablé mucho con él, pero espereo que acá en Pumas también se pueda hacer una buena asociación con él", cerró.
