Querella describe acusación contra funcionario de Gendarmería sobre un hecho ocurrido en el centro de detención preventiva Santiago 1.
Hasta 10 años de cárcel arriesga un gendarme acusado de agredir a Xiomara, una persona trans que se encontraba cumpliendo prisión preventiva en el centro de detención preventiva Santiago 1.
Se trata de un hecho ocurrido en junio de 2020, cuando la imputado la pidió permiso al custodio para ir a comprar cigarros. Sin embargo, Daniel Estrada Garay se negó.
Luego que el recluso lo insultara, el gendarme habría decidido ir a buscar un envase de gas lacrimógeno. De acuerdo a la denuncia, se lo lanzó a los ojos de Xiomara a corta distancia.
Según detalló La Tercera PM, el acusado sacó la víctima del módulo 87 (donde se encuentran personas que forman parte de grupos de diversidad sexual) y la metió a la celda conocida como “la jaula”. En aquel lugar, Xiomara fue brutalmente agredida por los reclusos.
“Me empezaron a pegar patadas, combos, me tiraron al suelo, y yo no me podía defender, donde no veía. En el suelo me pegaron patadas, me tiraron el pelo y como había un termo con agua caliente que les dio el mozo antes, me tiraron agua caliente en la espalda y me pegaron con el termo en el ojo derecho”, se lee en la declaración que dio la víctima ante fiscalía.
Además, aseguró que los agresores profirieron insultos homofóbicos.
Segunda víctima
Luego de algunos minutos, el mismo gendarme sacó a Xiomara de “la jaula” y la llevó hasta el recinto de salud del establecimiento penitenciario. Allí se confirmaron la gravedad de sus lesiones: “Trauma punzante con objeto contundente ojo derecho en región dorsal” y quemaduras en su espalda.
Producto de esta situación, William Cañola Valenzuela, de nombre social Raquel, le lanzó una bandeja al gendarme Estrada, quien respondió con gas lacrimógeno.
Tal como se señala en la querella presentada por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), el gendarme llevó a Raquel al mismo lugar donde Xiomara había sido golpeada. Sin embargo, esta vez los recluso no agredieron a la mujer, sino que fue el propio funcionario quien la atacó.
Luego de cerrarse el caso, el INDH solicitó la reapertura de la causa y el fiscal Marcelo Leiva presentó la acusación en contra del gendarme Daniel Estrada Godoy por tortura y apremios ilegítimos.
El Ministerio Público solicitó la pena de siete años por el delito de torturas y 3 años por apremios ilegítimos para Estrada. En tanto, los imputados por lesiones arriesgan 540 días de presidio.
Con estos antecedentes, el tribunal acogió este requerimiento y se fijó la audiencia de preparación de juicio oral y reapertura de la investigación para el próximo 23 de febrero.