El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, señaló que la iniciativa busca hacer frente al crecimiento de la variante entre los contagiados y que ello no signifique "celebrar hoy y estar de luto mañana".
Tras su aparición en África, en noviembre, la variante Ómicron del virus se ha expandido al resto del mundo. Hoy ya es la dominante en EE.UU y en europa ya hay mayores restricciones, en países como Holanda, Austria y Reino Unido. La proyección es que mediados de enero, también lo será en los 27 países de la Unión Europea.
Incluso, ya hay casos de la variante en el país. Tras detectarse el primer caso en el país, el pasado 4 de diciembre, al menos 73 personas han sido contagiadas en el territorio chileno.
Por ello, desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) hicieron un llamado de alerta ante la rápida expansión de la variable. El director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, llamó a “tomar conciencia”, de la gravedad del problema. Por ello, llamó a suspender las celebraciones de fin de año, ya que a su juicio eso significa “celebrar hoy y estar de luto mañana”.
Según el directivo de la OMS, las aglomeraciones y reuniones a causa de las festividades navideñas, llevarían a “un aumento de casos, sistemas de salud colapsados y más muertes”.
Pese a que las cifras se han mantenido bajas, se estima un alto número de contagios en los próximos meses. La jefa de Infectología de Clínica Alemana, doctora Inia Pérez, manifestó a Soy Chile que “los estudios demuestran que la variante Ómicron es una variante con mayor poder de contagiar, es decir es más contagiante que las otras variantes, pero a la vez ha mostrado que su cuadro clínico puede ser un poco más leve y seguir siendo más parecido a un resfrío”.